por GABY Sáb Jul 28, 2012 4:13 amLa minería metalífera se ha transformado en un tema central en la última década, entre otras cosas por una tendencia al aumento de los precios internacionales, especialmente el oro, que parece no tener techo.
La crisis del sistema financiero internacional trajo como consecuencia una devaluación del dólar, llevando a los grandes capitales internacionales a refugiarse en el oro haciendo que su valor ascienda a niveles impensados.
El excedente acumulado por estos sectores del capital concentrado busca algún refugio donde las tasas de ganancias sean similares a las obtenidas con la especulación. Desde este punto de vista las inversiones en desarrollo minero parece ser una buena salida.
Estas corporaciones ven a la explotación minera como una nueva forma de elaborar commodities para la especulación y no como una rama estratégica de la producción de un país como se pudo observar con el caso de Repsol-YPF. El sistema financiero, hacia 2002 incluyó al oro en el grupo de commodities con fondos de inversión propios. La creciente inversión en este tipo de fondos disparó la cotización del mismo. La demanda de oro para inversión creció un 273%.
Los países latinoamericanos se encuentran en una situación muy vulnerable para plantarse frente a estos capitales. La condición de productores primarios en la división internacional del trabajo nos mantiene con complicadas balanzas comerciales que comprometen seriamente cualquier intento de desarrollo endógeno. Los altos precios internacionales de los distintos minerales hacen ver una opción tentadora su explotación para mejorar las exportaciones y sanear las cuentas públicas.
Entre el año 2000 y el 2005, las exportaciones anuales del complejo cobre se incrementaron un 143%. En los primeros seis meses del año 2006 ya se habían superado las exportaciones de todo el año 2005 (es decir, de toda la historia de la minería argentina). La exportación de cobre pasó de representar el 1,3% del total de exportaciones en el año 2001 al 4,1% en el 2006.
Sin embargo, la explotación minera tiene una particular característica ya que su explotación es destructiva, una vez que se extrae el mineral no vuelve a reproducirse por lo que ver esta salida a corto plazo solo trae problemas a futuro.
La década de los 90, fue fiel reflejo de esta concepción, que solo priorizó los beneficios empresarios para conseguir divisas internacionales en el corto plazo. La legislación en la materia, muestra claramente cuál fue el sentido que se le quiso dar a la explotación minera.
Durante la presidencia de Carlos Menem, en 1993, se sancionó la Ley de Inversiones Mineras 24.196 (aún vigente) donde se establecieron incentivos para los inversores:
*Doble deducción de los gastos de exploración (hasta el 100% de lo invertido) a los efectos del cálculo del impuesto a las ganancias.
*Devolución de los créditos fiscales de IVA originados en inversión en exploración. Estabilidad fiscal y cambiaria por 30 años a partir de la presentación del estudio de factibilidad (Art. 8°). Rige también para los reembolsos y reintegros de impuestos relacionados con la exportación.
*Amortización acelerada para las inversiones de capital
*Exención del pago de derechos a la importación de bienes de capital y equipos especiales o partes componentes de dichos bienes (incluye a las compañías de servicios mineros).
*Exenciones impositivas y deducciones: las utilidades derivadas del aporte de minas y derechos mineros para constituir capital de sociedades están exentas del impuesto a las ganancias.
*Exención del Impuesto a la Ganancia Mínima Presunta (Activos).
*Capitalización de los avalúos de reservas mineras (hasta en un 50%).
*Devolución anticipada y financiamiento de IVA.
*Eliminación de gravámenes y tasas municipales e impuestos de sellos que afecten la actividad minera en cada provincia.
*Limitación de las regalías a un máximo del 3% del “valor boca de mina” del mineral extraído (Art. 22°; de las 23 provincias argentinas, sólo 7 cobran regalías).
*Amplia libertad para el movimiento de capitales, sin limitaciones para la remisión de dividendos.
En este sentido, y para comprender el proceso de entrada a la Argentina de algunas de las más importantes empresas mineras del mundo, debe destacarse que hacia 1999 la Argentina presentaba una de las tasas internas de retorno más elevadas del mundo para la producción de cobre y oro; hecho que se vio magnificado por la modificación de la paridad cambiaria.
Como consecuencia de la legislación minera cristalizada durante la última década y media se desarrollaron fuertemente las inversiones en la producción de minerales metálicos, colocando a la Argentina entre los países que mejores condiciones garantiza para la obtención de beneficios empresarios. Todo esto con el solo objeto de obtener el ingreso de divisas internacionales que por la misma legislación se transfirieron al exterior. Lo único que realmente queda en el país es el saldo ambiental, ya que no se le incorpora valor agregado en nuestro territorio al mineral extraído y la renta queda en manos privadas.
De muestra basta un botón, o dos…
Consecuencias de la legislación minera: 2 casos concretos
Para poder analizar las consecuencias de la legislación en materia minera vamos a tomar dos de los emprendimientos mineros metalíferos más importantes en la Argentina como lo son el caso de Minera Alumbrera en la provincia de Catamarca y de Minera Argentina Gold S.A. en la provincia de San Juan.
La renta minera se calcula a partir de la diferencia entre la facturación anual, los costos de producción y la ganancia media del capital. Sobre este resultado se calcula la participación de las regalías y de los impuestos (apropiación pública de la renta). Finalmente, del cálculo precedente se desprende la participación de la empresa productora sobre el total de la renta (apropiación privada de la renta).
En promedio, la apropiación privada de la renta alcanzó al 55.2% de los recursos obtenidos durante el periodo analizado. En 2006, Minera Alumbrera registró ingresos en concepto de renta por 581 millones de dólares equivalente al 54.3% de la renta.
La participación del Estado sobre la renta minera se encuentra representada por el impacto del costo fiscal (apropiación pública de la renta) y las regalías. En el año 2006 se destaca que el Estado capturó 435 millones de dólares.
Las regalías mineras son la herramienta específica a partir de la cual el titular de los recursos naturales (las provincias) concreta su participación sobre la renta obtenida. En el caso de Minera Alumbrera (Catamarca) presenta un desempeño del 3.5% de la renta generada por la explotación. El pico de recaudación se encuentra en 2006 en el cual la provincia de Catamarca recibió 54 millones de dólares en concepto de regalías.
En el caso de San Juan, la empresa Minera Argentina Gold S.A., inició sus operaciones en 2006 en el proyecto de Veladero. Los niveles de renta presentan un sostenido crecimiento que se encuentra relacionado con la productividad de la empresa, caracterizada por cada vez mayores niveles de producción de oro y por la trayectoria ascendente del precio internacional del mismo. En este caso, la apropiación privada de la renta fue del 82.3% de la misma. Los ingresos impositivos presentan una participación promedio del 10.3% y las regalías del 7.3%.
Estos cuadros permiten observar las características de la distribución de la renta minera en el marco de la legislación de la década de los 90, todavía vigente. Se ilustra claramente las limitaciones impuestas a la participación del Estado, tanto en términos de regalías como en términos impositivos.
Federico Basualdo en su trabajo, analiza la renta minera a partir de la tasa de ganancia promedio de las empresas que conforman la elite empresaria en la economía argentina. Teniendo en cuenta que la mayoría de los emprendimientos mineros forman parte de la misma.
La tasa de ganancia de Minera Alumbrera asume niveles extraordinarios de manera tal que, en promedio, las utilidades obtenidas alcanzaron el 46.6% de las ventas realizadas durante los años analizados.
El desempeño de Minera Argentina Gold S.A. se utiliza como referencia de la segunda generación de emprendimientos como también por el hecho de que se ha posicionado como el principal productor de oro del país y como una de las explotaciones mineras de mayor envergadura.
Propiedad de Barrick Gold, la empresa presenta a partir de 2007, tasas de rentabilidad crecientes. Sin embargo, el año 2006 presentó resultados extraordinarios para la transnacional minera: ese año las utilidades fueron de 195 millones de dólares y alcanzaron el 60.4% de las ventas realizadas.
Se puede observar en 2008 una tasa de ganancias del 28.9% en tanto las utilidades ascendieron a 135 millones de dólares, el 60% de las cuales se explica como resultado de los ingresos generados por la renta aurífera. El año siguiente, la rentabilidad obtenida alcanzó a explicar el 43.4% de las ventas, siendo las utilidades de 261 millones de dólares.
Se desprende del análisis la relación directa que existe entre las ganancias extraordinarias de la transnacional y los niveles de apropiación privada de la renta. En la situación hipotética de que el Estado absorbiera el 100% de la renta del yacimiento, las utilidades de la empresa en 2005 alcanzarían los 90 millones de dólares. Como consecuencia, la tasa de ganancia sería de un 10.6%, situación en la cual los resultados obtenidos por la minera se ajustaría a la media obtenida por las principales empresas de la economía argentina. Siguiendo con esta situación hipotética, la tasa de ganancias hubiera sido en 2007 el 18.6% y en 2008 el 14.5%.
Conclusión
Los principales impulsores de las inversiones privadas en minería metalífera son los gobiernos de las provincias en cuyo dominio se encuentran los yacimientos. Ven su explotación como una salida al déficit fiscal que las mismas atraviesan debido a la precariedad de sus economías mientras que en la sociedad se ha instalado la idea de que la minería de la forma que se haga va a ser perjudicial para el medio ambiente.
Esta problemática desvía el centro de la escena otros asuntos, que visto a largo plazo, pueden ser más importantes. Pensar un plan estratégico productivo para cada provincia que tenga yacimientos minerales en su territorio, tomando en cuenta la realidad nacional, es el gran tema ausente.
Hay una característica de la industria minera que nos obliga a abordarla de una manera distinta que otras ramas de la producción, y es que la explotación es destructiva. Es decir una vez que se acaba el mineral, se acaba el negocio.
Los recursos que explotamos en el presente son un préstamo que tenemos de las generaciones futuras, por lo que hay que considerar que hacemos con el mismo. En consecuencia, la única forma sustentable de explotar este tipo de recursos pasa porque estos se transformen en el medio para conseguir otros que puedan ser utilizados por las generaciones futuras.
La única forma de darle un sentido estratégico a la explotación minera es que el Estado intervenga. El andamiaje jurídico establecido durante los años 90´está basado justamente de sacar al Estado del medio.
Los ejemplos analizados de las empresas establecidas en San Juan y Catamarca muestran el potencial enorme que tiene la explotación minera si en esta participara el Estado.
Por lo tanto, la mejor manera de proteger el medio ambiente, no solamente pasa por aplicar nuestra legislación al respecto, sino que hay que discutir quien se queda con la renta.
Mariano Moreno elaboró un plan de gobierno revolucionario en su época que con respecto a la explotación minera decía: “se prohíbe absolutamente que ningún particular trabaje minas de plata u oro, quedando el arbitrio de beneficiarla y sacar sus tesoros por cuenta de la Nación, (…) imponiendo pena capital y confiscación de bienes”.
Pareciera ser que las respuestas de nuestros problemas actuales, se encuentran, si miramos más detenidamente, en nuestra historia.
BIBLIOGRAFÍA
*Documento: Invertir en Argentina: Minería 2005 (http://www.inversiones.gov.ar/documentos /mineria.pdf)
*Publicación CEPAL, Serie Recursos Naturales e Infraestructura - Situación y perspectivas de la minería metálica en Argentina, Oscar A. Prado, mayo de 2005
*Plan de Operaciones de Mariano Moreno
*La extracción de recursos naturales y la persistencia de las reformas neoliberales en la Argentina “progresista”. Ricardo Ortiz
*Secretaría de Minería de la Nación:
*Marco legal: http://www.mineria.gov.ar/marcolegal.htm
*Revista Digital de Economía Política N°2 “Apuntes para el cambio” marzo/abril 2012
*“IDENTIDADES EN CONFLICTO. Reconversión neocolonial, conflictos socio-territoriales y procesos de subjetivación en un contexto periférico del capitalismo global”, Horacio Machado Aráoz
Articulo de Le Monde diplomatique Agosto 2008 Especial de “EXPLOTACIÓN DE LOS RECURSOS NATURALES” “Controles y fiscalidad del siglo XIX en Argentina” “Inauditos Privilegios de la minería” por Nicolás Gutman y Roberto Adaro
por Juan Manuel Gispert @JuanGispert
http://rinacional.com.ar
La crisis del sistema financiero internacional trajo como consecuencia una devaluación del dólar, llevando a los grandes capitales internacionales a refugiarse en el oro haciendo que su valor ascienda a niveles impensados.
El excedente acumulado por estos sectores del capital concentrado busca algún refugio donde las tasas de ganancias sean similares a las obtenidas con la especulación. Desde este punto de vista las inversiones en desarrollo minero parece ser una buena salida.
Estas corporaciones ven a la explotación minera como una nueva forma de elaborar commodities para la especulación y no como una rama estratégica de la producción de un país como se pudo observar con el caso de Repsol-YPF. El sistema financiero, hacia 2002 incluyó al oro en el grupo de commodities con fondos de inversión propios. La creciente inversión en este tipo de fondos disparó la cotización del mismo. La demanda de oro para inversión creció un 273%.
Los países latinoamericanos se encuentran en una situación muy vulnerable para plantarse frente a estos capitales. La condición de productores primarios en la división internacional del trabajo nos mantiene con complicadas balanzas comerciales que comprometen seriamente cualquier intento de desarrollo endógeno. Los altos precios internacionales de los distintos minerales hacen ver una opción tentadora su explotación para mejorar las exportaciones y sanear las cuentas públicas.
Entre el año 2000 y el 2005, las exportaciones anuales del complejo cobre se incrementaron un 143%. En los primeros seis meses del año 2006 ya se habían superado las exportaciones de todo el año 2005 (es decir, de toda la historia de la minería argentina). La exportación de cobre pasó de representar el 1,3% del total de exportaciones en el año 2001 al 4,1% en el 2006.
Sin embargo, la explotación minera tiene una particular característica ya que su explotación es destructiva, una vez que se extrae el mineral no vuelve a reproducirse por lo que ver esta salida a corto plazo solo trae problemas a futuro.
La década de los 90, fue fiel reflejo de esta concepción, que solo priorizó los beneficios empresarios para conseguir divisas internacionales en el corto plazo. La legislación en la materia, muestra claramente cuál fue el sentido que se le quiso dar a la explotación minera.
Durante la presidencia de Carlos Menem, en 1993, se sancionó la Ley de Inversiones Mineras 24.196 (aún vigente) donde se establecieron incentivos para los inversores:
*Doble deducción de los gastos de exploración (hasta el 100% de lo invertido) a los efectos del cálculo del impuesto a las ganancias.
*Devolución de los créditos fiscales de IVA originados en inversión en exploración. Estabilidad fiscal y cambiaria por 30 años a partir de la presentación del estudio de factibilidad (Art. 8°). Rige también para los reembolsos y reintegros de impuestos relacionados con la exportación.
*Amortización acelerada para las inversiones de capital
*Exención del pago de derechos a la importación de bienes de capital y equipos especiales o partes componentes de dichos bienes (incluye a las compañías de servicios mineros).
*Exenciones impositivas y deducciones: las utilidades derivadas del aporte de minas y derechos mineros para constituir capital de sociedades están exentas del impuesto a las ganancias.
*Exención del Impuesto a la Ganancia Mínima Presunta (Activos).
*Capitalización de los avalúos de reservas mineras (hasta en un 50%).
*Devolución anticipada y financiamiento de IVA.
*Eliminación de gravámenes y tasas municipales e impuestos de sellos que afecten la actividad minera en cada provincia.
*Limitación de las regalías a un máximo del 3% del “valor boca de mina” del mineral extraído (Art. 22°; de las 23 provincias argentinas, sólo 7 cobran regalías).
*Amplia libertad para el movimiento de capitales, sin limitaciones para la remisión de dividendos.
En este sentido, y para comprender el proceso de entrada a la Argentina de algunas de las más importantes empresas mineras del mundo, debe destacarse que hacia 1999 la Argentina presentaba una de las tasas internas de retorno más elevadas del mundo para la producción de cobre y oro; hecho que se vio magnificado por la modificación de la paridad cambiaria.
Como consecuencia de la legislación minera cristalizada durante la última década y media se desarrollaron fuertemente las inversiones en la producción de minerales metálicos, colocando a la Argentina entre los países que mejores condiciones garantiza para la obtención de beneficios empresarios. Todo esto con el solo objeto de obtener el ingreso de divisas internacionales que por la misma legislación se transfirieron al exterior. Lo único que realmente queda en el país es el saldo ambiental, ya que no se le incorpora valor agregado en nuestro territorio al mineral extraído y la renta queda en manos privadas.
De muestra basta un botón, o dos…
Consecuencias de la legislación minera: 2 casos concretos
Para poder analizar las consecuencias de la legislación en materia minera vamos a tomar dos de los emprendimientos mineros metalíferos más importantes en la Argentina como lo son el caso de Minera Alumbrera en la provincia de Catamarca y de Minera Argentina Gold S.A. en la provincia de San Juan.
La renta minera se calcula a partir de la diferencia entre la facturación anual, los costos de producción y la ganancia media del capital. Sobre este resultado se calcula la participación de las regalías y de los impuestos (apropiación pública de la renta). Finalmente, del cálculo precedente se desprende la participación de la empresa productora sobre el total de la renta (apropiación privada de la renta).
En promedio, la apropiación privada de la renta alcanzó al 55.2% de los recursos obtenidos durante el periodo analizado. En 2006, Minera Alumbrera registró ingresos en concepto de renta por 581 millones de dólares equivalente al 54.3% de la renta.
La participación del Estado sobre la renta minera se encuentra representada por el impacto del costo fiscal (apropiación pública de la renta) y las regalías. En el año 2006 se destaca que el Estado capturó 435 millones de dólares.
Las regalías mineras son la herramienta específica a partir de la cual el titular de los recursos naturales (las provincias) concreta su participación sobre la renta obtenida. En el caso de Minera Alumbrera (Catamarca) presenta un desempeño del 3.5% de la renta generada por la explotación. El pico de recaudación se encuentra en 2006 en el cual la provincia de Catamarca recibió 54 millones de dólares en concepto de regalías.
En el caso de San Juan, la empresa Minera Argentina Gold S.A., inició sus operaciones en 2006 en el proyecto de Veladero. Los niveles de renta presentan un sostenido crecimiento que se encuentra relacionado con la productividad de la empresa, caracterizada por cada vez mayores niveles de producción de oro y por la trayectoria ascendente del precio internacional del mismo. En este caso, la apropiación privada de la renta fue del 82.3% de la misma. Los ingresos impositivos presentan una participación promedio del 10.3% y las regalías del 7.3%.
Estos cuadros permiten observar las características de la distribución de la renta minera en el marco de la legislación de la década de los 90, todavía vigente. Se ilustra claramente las limitaciones impuestas a la participación del Estado, tanto en términos de regalías como en términos impositivos.
Federico Basualdo en su trabajo, analiza la renta minera a partir de la tasa de ganancia promedio de las empresas que conforman la elite empresaria en la economía argentina. Teniendo en cuenta que la mayoría de los emprendimientos mineros forman parte de la misma.
La tasa de ganancia de Minera Alumbrera asume niveles extraordinarios de manera tal que, en promedio, las utilidades obtenidas alcanzaron el 46.6% de las ventas realizadas durante los años analizados.
El desempeño de Minera Argentina Gold S.A. se utiliza como referencia de la segunda generación de emprendimientos como también por el hecho de que se ha posicionado como el principal productor de oro del país y como una de las explotaciones mineras de mayor envergadura.
Propiedad de Barrick Gold, la empresa presenta a partir de 2007, tasas de rentabilidad crecientes. Sin embargo, el año 2006 presentó resultados extraordinarios para la transnacional minera: ese año las utilidades fueron de 195 millones de dólares y alcanzaron el 60.4% de las ventas realizadas.
Se puede observar en 2008 una tasa de ganancias del 28.9% en tanto las utilidades ascendieron a 135 millones de dólares, el 60% de las cuales se explica como resultado de los ingresos generados por la renta aurífera. El año siguiente, la rentabilidad obtenida alcanzó a explicar el 43.4% de las ventas, siendo las utilidades de 261 millones de dólares.
Se desprende del análisis la relación directa que existe entre las ganancias extraordinarias de la transnacional y los niveles de apropiación privada de la renta. En la situación hipotética de que el Estado absorbiera el 100% de la renta del yacimiento, las utilidades de la empresa en 2005 alcanzarían los 90 millones de dólares. Como consecuencia, la tasa de ganancia sería de un 10.6%, situación en la cual los resultados obtenidos por la minera se ajustaría a la media obtenida por las principales empresas de la economía argentina. Siguiendo con esta situación hipotética, la tasa de ganancias hubiera sido en 2007 el 18.6% y en 2008 el 14.5%.
Conclusión
Los principales impulsores de las inversiones privadas en minería metalífera son los gobiernos de las provincias en cuyo dominio se encuentran los yacimientos. Ven su explotación como una salida al déficit fiscal que las mismas atraviesan debido a la precariedad de sus economías mientras que en la sociedad se ha instalado la idea de que la minería de la forma que se haga va a ser perjudicial para el medio ambiente.
Esta problemática desvía el centro de la escena otros asuntos, que visto a largo plazo, pueden ser más importantes. Pensar un plan estratégico productivo para cada provincia que tenga yacimientos minerales en su territorio, tomando en cuenta la realidad nacional, es el gran tema ausente.
Hay una característica de la industria minera que nos obliga a abordarla de una manera distinta que otras ramas de la producción, y es que la explotación es destructiva. Es decir una vez que se acaba el mineral, se acaba el negocio.
Los recursos que explotamos en el presente son un préstamo que tenemos de las generaciones futuras, por lo que hay que considerar que hacemos con el mismo. En consecuencia, la única forma sustentable de explotar este tipo de recursos pasa porque estos se transformen en el medio para conseguir otros que puedan ser utilizados por las generaciones futuras.
La única forma de darle un sentido estratégico a la explotación minera es que el Estado intervenga. El andamiaje jurídico establecido durante los años 90´está basado justamente de sacar al Estado del medio.
Los ejemplos analizados de las empresas establecidas en San Juan y Catamarca muestran el potencial enorme que tiene la explotación minera si en esta participara el Estado.
Por lo tanto, la mejor manera de proteger el medio ambiente, no solamente pasa por aplicar nuestra legislación al respecto, sino que hay que discutir quien se queda con la renta.
Mariano Moreno elaboró un plan de gobierno revolucionario en su época que con respecto a la explotación minera decía: “se prohíbe absolutamente que ningún particular trabaje minas de plata u oro, quedando el arbitrio de beneficiarla y sacar sus tesoros por cuenta de la Nación, (…) imponiendo pena capital y confiscación de bienes”.
Pareciera ser que las respuestas de nuestros problemas actuales, se encuentran, si miramos más detenidamente, en nuestra historia.
BIBLIOGRAFÍA
*Documento: Invertir en Argentina: Minería 2005 (http://www.inversiones.gov.ar/documentos /mineria.pdf)
*Publicación CEPAL, Serie Recursos Naturales e Infraestructura - Situación y perspectivas de la minería metálica en Argentina, Oscar A. Prado, mayo de 2005
*Plan de Operaciones de Mariano Moreno
*La extracción de recursos naturales y la persistencia de las reformas neoliberales en la Argentina “progresista”. Ricardo Ortiz
*Secretaría de Minería de la Nación:
*Marco legal: http://www.mineria.gov.ar/marcolegal.htm
*Revista Digital de Economía Política N°2 “Apuntes para el cambio” marzo/abril 2012
*“IDENTIDADES EN CONFLICTO. Reconversión neocolonial, conflictos socio-territoriales y procesos de subjetivación en un contexto periférico del capitalismo global”, Horacio Machado Aráoz
Articulo de Le Monde diplomatique Agosto 2008 Especial de “EXPLOTACIÓN DE LOS RECURSOS NATURALES” “Controles y fiscalidad del siglo XIX en Argentina” “Inauditos Privilegios de la minería” por Nicolás Gutman y Roberto Adaro
por Juan Manuel Gispert @JuanGispert
http://rinacional.com.ar
