por GABY Jue Feb 02, 2012 9:37 pmPALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, CRISTINA FERNÁNDEZ, EN EL ACTO DE LANZAMIENTO DE LA SUBSECRETARÍA DE DESARROLLO RURAL Y AGRICULTURA FAMILIAR, EN EL PARTIDO DE MORENO.
Muchas gracias, buenas noches a todos y a todas; señor Intendente de Moreno; señor Gobernador de la provincia de Buenos Aires; de Córdoba; de Formosa; de La Pampa; de Santiago del Estero ; trabajadores y trabajadoras rurales, campesinos, familia rural: querido decirles que siento un gran honor de estar aquí, hoy, junto a los que trabajan la tierra de sol a sol, de sol a sol, junto a los hombres y mujeres que a lo largo y ancho del país contribuyen todos los días a construir soberanía alimentaria para el pueblo argentino. (APLAUSOS).
Yo recién escuchaba a Carlos Cheppi enumerar las cifras que vamos a destinar, precisamente, a todo lo que es la infraestructura, al drama de la sequía y pensaba estamos en el buen camino, mientras en otros países andan salvando bancos, nosotros estamos poniendo plata para los que trabajan, para los hombres y mujeres de la tierra. (APLAUSOS).
Siento, hermanos y hermanas, que andamos bien orientados, si además sumamos a todo lo que acaba de enumerar Carlos, y antes Guillermo, con la subsecretaria tan ansiada, esa creación de la pequeña subsecretaria, pequeña porque se ocupa también de lo pequeño, pero grande porque es un objetivo finalmente logrado: tener un espacio institucional en el Estado que se acuerde, en serio, de los pequeños y medianos productores y de la agricultura familiar. (APLAUSOS)
Pero decía, que además de estas cifras, debemos sumar también las compensaciones que a partir de marzo, del año pasado, comenzaron a pagarse a productores trigueros, a molinos, a filoteros, a la industria lechera, a los tamberos, a todos los hombres y mujeres de nuestro campo, que trabajan para dar soberanía alimentaria y también para exportar.
Yo escuchaba recién los números, ustedes representan las 2/3 partes de los establecimientos rurales y el 53 por ciento de los alimentos que consumimos los argentinos. Por eso el rol de ustedes es esencial y es también esencial la organización. Porque la organización de todos ustedes permitirá la tranquilidad en la mesa de todos los argentinos. (APLAUSOS). Y el esfuerzo que hace todo el pueblo de poner dinero en una actividad que es fundamental, y que está vinculada a la historia misma de la República Argentina, a nuestras convicciones, a nuestra historia. Y yo pensaba que eso lo tenemos que valorar fuertemente todos los hombres y mujeres, aquí en el país. Tal vez no podamos hacer lo mismo con otras actividad, con el taxista que por allí no consigue pasajeros, o con el tallerista del Gran Buenos Aires que tiene que cerrar, o con un comerciante, o con un profesional. Lo hacemos precisamente con la actividad rural porque sabemos de la importancia de la producción alimentaria y de la actividad que esto genera en todos nuestros pueblos, el compromiso fuerte, que tenemos además en la necesidad de diversificar nuestra matriz productiva. (APLAUSOS).
Vengo de otro evento, antes de aquí, que tiene que ver con la otra gran cuestión de lo que se va a dar y se da, en el siglo XXI: la energía, donde el sector privado energético acaba de anunciar una inversión multimillonaria, de 1.500 millones de dólares, en el sector gasífero. Y acá venimos a poner desde el sector público al sector privado, a la actividad rural un esfuerzo muy grande. Porque queremos producir cada vez más y mejor para los argentinos y para el mundo también, tenemos la capacidad para poder hacerlo. (APLAUSOS).
Y yo quiero convocar, desde este lugar, desde Moreno, provincia de Buenos Aires, junto a todos ustedes, hombres de Misiones, de Jujuy, de Corrientes, de Entre Ríos, de Córdoba, de Santa Fe, de Mendosa, de San Juan, de Río Negro, donde el martes estaré firmando junto a los Gobernadores de Neuquen, de San Juan, de Mendoza y de Río Negro el convenio frutihortícola también para profundizar el rol de la Argentina.
Ustedes saben somos los primeros productores en peras, a nivel mundial, y también de jugo de manzanas y vamos a seguir apostando, además, a agregar cada vez más valor a esa producción. Porque cuanto más valor le agreguemos mejores salarios vamos a tener, mejores remuneración vamos a lograr, mayor inclusión social vamos a obtener. Estos deben ser los grandes objetivos, que deben mover a toda la dirigencia: a la pequeña, como está aquí y a la grande, que no está aquí, pero que son argentinos y que tienen que entender que finalmente el esfuerzo de todos nos permitirá seguir creciendo, como lo hemos hecho hasta ahora. (APLAUSOS). Se requiere una gran dosis de responsabilidad y saben qué, se requiere también una dosis de patriotismo, porque sin concebirnos como un país homogéneo, si no nos concebimos también como una Nación, como la Patria no tendremos objetivos. Y las sociedades sin objetivos, únicamente con fines de lucro no llegan demasiado lejos, durante demasiado tiempo. (APLAUSOS)
Hermanos y hermanas: no es que estemos en contra de la rentabilidad, todos queremos ganar plata, el que trabaja, el que agacha el lomo también quiere ganar plata porque quiere una mejor casa, porque quiere mejores estudios para sus hijos, porque quiere lograr comprarse una camioneta, a lo mejor, el tractor. Todos queremos ganar, pero también tenemos que saber que no puede ser que todo se ganen todo, a costa de que otros no tengan nada. Esto también es parte de la Argentina. (APLAUSOS).
Yo los convoco a todos al diálogo, a la articulación entre lo público y lo privado, a la solidaridad más profunda, también a la racionalidad. Porque saben qué, siempre les digo, cuando uno es un actor económico, cuando uno tiene que tomar una decisión económica tiene que tomarla pensando precisamente en eso: en lo que más conviene, en lo que más nos sirve a todos porque entonces de esa manera se logra la cohesión social, que es también una gran generadora de riquezas.
Miremos cómo han crecido en otros lados, han crecido generando igualdad de oportunidades para todos, que nos permitan tener mayor justicia y equidad; la justicia y la equidad no solamente son conceptos éticos o morales son también profundos conceptos económicos y políticos, y queremos hacernos cargo de eso. (APLAUSOS)
Es un momento muy especial, hermanos y hermanas, el que atraviesa el mundo, se caen viejos paradigmas, se derrumban modelos de acumulación que olvidaron que el trabajo y la producción son lo que dignifican.
Estamos argentinos ante una oportunidad histórica, somos un país con inmensos recursos naturales, diversificados, con enormes extensiones de tierras cultivables que otros países no tienen, con recursos humanos altamente calificados, sin problemas religiosos, sin problemas de migraciones, sin problemas étnicos que nos enfrenten o nos dividan y nos hagan perder el esfuerzo común. Entonces, con todas estas virtudes, aprovechemos estas bendiciones que Dios nos ha dado y no perdamos más el tiempo en enfrentamientos inútiles (APLAUSOS). Es necesario que cada argentino desde el lugar donde esté por importante que sea o mínimo que le parezca, contribuya a construir un país mejor.
Estamos ante nuevos tiempos, ante surgimientos de nuevos órdenes, tal vez imperceptibles para el ojo de alguno, pero no tengan dudas, estamos ante un fin de época, pero estamos ante el comienzo de una nueva historia, y el desafío es construirla entre todos (APLAUSOS).
Yo sé que la Argentina, nuestro país, el país en el que nací, el país al que vinieron mis abuelos en barcos, tal vez como muchos de los abuelos o padres de ustedes, muertos de hambre, con una mano atrás y otra adelante, vamos a ser capaces de hacerles honor a ellos, que vinieron a trabajar la tierra.
Yo me acuerdo todavía de mi abuelo, tambero, floricultor en City Bell cuando City Bell era campo, no lo que es ahora, y recuerdo el esfuerzo de sol a sol, de todo lo que lograron. Por eso estoy absolutamente convencida de que lo vamos a hacer, Argentina lo va a hacer, con la misma convicción que en el 2003 arrancamos en un modelo político, cultural, económico, social diferente.
Nos miraban de reojo, a lo mejor son nostálgicos, nos dieron palos durante tantos años diciendo que estábamos equivocados en lo que estábamos haciendo, querían liberalismo, era lo que regía el mundo, y miren ahora, no es para solazarse, simplemente para dejar de ser tontos y aprender a valorarnos a nosotros mismos. (APLAUSOS)
Quiero finalmente agradecer el esfuerzo que todos y cada uno de ustedes ha hecho para acercarse a este congreso, quiero felicitar a los hombres y a las mujeres de la Secretaría de Agricultura, a Carlos, a Carla, a Guillermo, hombres y mujeres comprometidos con lo que hacen, no solamente son profesionales, la técnica te permite contar o diseñar los instrumentos, pero hay cosas que no te las enseñan en la universidad, se sienten acá, el compromiso con lo nuestro, con los más vulnerables, con los que más necesitan, con al tierra, con el medio ambiente. (APLAUSOS)
Por eso a seguir trabajando y hoy, más que nunca, con la convicción de que la construcción colectiva es el camino que tenemos que tener todos los argentinos.
Gracias y muy buenas noches a todos, gracias a Misiones, gracias a Entre Ríos, gracias a Corrientes, Córdoba, Santa Fe, Salta, Santiago del Estero, Jujuy, La Rioja, Mendoza, gracias a todos, y si me olvidé de alguno perdónenme, pero los tengo a todos en el corazón. Muchas gracias.
Muchas gracias, buenas noches a todos y a todas; señor Intendente de Moreno; señor Gobernador de la provincia de Buenos Aires; de Córdoba; de Formosa; de La Pampa; de Santiago del Estero ; trabajadores y trabajadoras rurales, campesinos, familia rural: querido decirles que siento un gran honor de estar aquí, hoy, junto a los que trabajan la tierra de sol a sol, de sol a sol, junto a los hombres y mujeres que a lo largo y ancho del país contribuyen todos los días a construir soberanía alimentaria para el pueblo argentino. (APLAUSOS).
Yo recién escuchaba a Carlos Cheppi enumerar las cifras que vamos a destinar, precisamente, a todo lo que es la infraestructura, al drama de la sequía y pensaba estamos en el buen camino, mientras en otros países andan salvando bancos, nosotros estamos poniendo plata para los que trabajan, para los hombres y mujeres de la tierra. (APLAUSOS).
Siento, hermanos y hermanas, que andamos bien orientados, si además sumamos a todo lo que acaba de enumerar Carlos, y antes Guillermo, con la subsecretaria tan ansiada, esa creación de la pequeña subsecretaria, pequeña porque se ocupa también de lo pequeño, pero grande porque es un objetivo finalmente logrado: tener un espacio institucional en el Estado que se acuerde, en serio, de los pequeños y medianos productores y de la agricultura familiar. (APLAUSOS)
Pero decía, que además de estas cifras, debemos sumar también las compensaciones que a partir de marzo, del año pasado, comenzaron a pagarse a productores trigueros, a molinos, a filoteros, a la industria lechera, a los tamberos, a todos los hombres y mujeres de nuestro campo, que trabajan para dar soberanía alimentaria y también para exportar.
Yo escuchaba recién los números, ustedes representan las 2/3 partes de los establecimientos rurales y el 53 por ciento de los alimentos que consumimos los argentinos. Por eso el rol de ustedes es esencial y es también esencial la organización. Porque la organización de todos ustedes permitirá la tranquilidad en la mesa de todos los argentinos. (APLAUSOS). Y el esfuerzo que hace todo el pueblo de poner dinero en una actividad que es fundamental, y que está vinculada a la historia misma de la República Argentina, a nuestras convicciones, a nuestra historia. Y yo pensaba que eso lo tenemos que valorar fuertemente todos los hombres y mujeres, aquí en el país. Tal vez no podamos hacer lo mismo con otras actividad, con el taxista que por allí no consigue pasajeros, o con el tallerista del Gran Buenos Aires que tiene que cerrar, o con un comerciante, o con un profesional. Lo hacemos precisamente con la actividad rural porque sabemos de la importancia de la producción alimentaria y de la actividad que esto genera en todos nuestros pueblos, el compromiso fuerte, que tenemos además en la necesidad de diversificar nuestra matriz productiva. (APLAUSOS).
Vengo de otro evento, antes de aquí, que tiene que ver con la otra gran cuestión de lo que se va a dar y se da, en el siglo XXI: la energía, donde el sector privado energético acaba de anunciar una inversión multimillonaria, de 1.500 millones de dólares, en el sector gasífero. Y acá venimos a poner desde el sector público al sector privado, a la actividad rural un esfuerzo muy grande. Porque queremos producir cada vez más y mejor para los argentinos y para el mundo también, tenemos la capacidad para poder hacerlo. (APLAUSOS).
Y yo quiero convocar, desde este lugar, desde Moreno, provincia de Buenos Aires, junto a todos ustedes, hombres de Misiones, de Jujuy, de Corrientes, de Entre Ríos, de Córdoba, de Santa Fe, de Mendosa, de San Juan, de Río Negro, donde el martes estaré firmando junto a los Gobernadores de Neuquen, de San Juan, de Mendoza y de Río Negro el convenio frutihortícola también para profundizar el rol de la Argentina.
Ustedes saben somos los primeros productores en peras, a nivel mundial, y también de jugo de manzanas y vamos a seguir apostando, además, a agregar cada vez más valor a esa producción. Porque cuanto más valor le agreguemos mejores salarios vamos a tener, mejores remuneración vamos a lograr, mayor inclusión social vamos a obtener. Estos deben ser los grandes objetivos, que deben mover a toda la dirigencia: a la pequeña, como está aquí y a la grande, que no está aquí, pero que son argentinos y que tienen que entender que finalmente el esfuerzo de todos nos permitirá seguir creciendo, como lo hemos hecho hasta ahora. (APLAUSOS). Se requiere una gran dosis de responsabilidad y saben qué, se requiere también una dosis de patriotismo, porque sin concebirnos como un país homogéneo, si no nos concebimos también como una Nación, como la Patria no tendremos objetivos. Y las sociedades sin objetivos, únicamente con fines de lucro no llegan demasiado lejos, durante demasiado tiempo. (APLAUSOS)
Hermanos y hermanas: no es que estemos en contra de la rentabilidad, todos queremos ganar plata, el que trabaja, el que agacha el lomo también quiere ganar plata porque quiere una mejor casa, porque quiere mejores estudios para sus hijos, porque quiere lograr comprarse una camioneta, a lo mejor, el tractor. Todos queremos ganar, pero también tenemos que saber que no puede ser que todo se ganen todo, a costa de que otros no tengan nada. Esto también es parte de la Argentina. (APLAUSOS).
Yo los convoco a todos al diálogo, a la articulación entre lo público y lo privado, a la solidaridad más profunda, también a la racionalidad. Porque saben qué, siempre les digo, cuando uno es un actor económico, cuando uno tiene que tomar una decisión económica tiene que tomarla pensando precisamente en eso: en lo que más conviene, en lo que más nos sirve a todos porque entonces de esa manera se logra la cohesión social, que es también una gran generadora de riquezas.
Miremos cómo han crecido en otros lados, han crecido generando igualdad de oportunidades para todos, que nos permitan tener mayor justicia y equidad; la justicia y la equidad no solamente son conceptos éticos o morales son también profundos conceptos económicos y políticos, y queremos hacernos cargo de eso. (APLAUSOS)
Es un momento muy especial, hermanos y hermanas, el que atraviesa el mundo, se caen viejos paradigmas, se derrumban modelos de acumulación que olvidaron que el trabajo y la producción son lo que dignifican.
Estamos argentinos ante una oportunidad histórica, somos un país con inmensos recursos naturales, diversificados, con enormes extensiones de tierras cultivables que otros países no tienen, con recursos humanos altamente calificados, sin problemas religiosos, sin problemas de migraciones, sin problemas étnicos que nos enfrenten o nos dividan y nos hagan perder el esfuerzo común. Entonces, con todas estas virtudes, aprovechemos estas bendiciones que Dios nos ha dado y no perdamos más el tiempo en enfrentamientos inútiles (APLAUSOS). Es necesario que cada argentino desde el lugar donde esté por importante que sea o mínimo que le parezca, contribuya a construir un país mejor.
Estamos ante nuevos tiempos, ante surgimientos de nuevos órdenes, tal vez imperceptibles para el ojo de alguno, pero no tengan dudas, estamos ante un fin de época, pero estamos ante el comienzo de una nueva historia, y el desafío es construirla entre todos (APLAUSOS).
Yo sé que la Argentina, nuestro país, el país en el que nací, el país al que vinieron mis abuelos en barcos, tal vez como muchos de los abuelos o padres de ustedes, muertos de hambre, con una mano atrás y otra adelante, vamos a ser capaces de hacerles honor a ellos, que vinieron a trabajar la tierra.
Yo me acuerdo todavía de mi abuelo, tambero, floricultor en City Bell cuando City Bell era campo, no lo que es ahora, y recuerdo el esfuerzo de sol a sol, de todo lo que lograron. Por eso estoy absolutamente convencida de que lo vamos a hacer, Argentina lo va a hacer, con la misma convicción que en el 2003 arrancamos en un modelo político, cultural, económico, social diferente.
Nos miraban de reojo, a lo mejor son nostálgicos, nos dieron palos durante tantos años diciendo que estábamos equivocados en lo que estábamos haciendo, querían liberalismo, era lo que regía el mundo, y miren ahora, no es para solazarse, simplemente para dejar de ser tontos y aprender a valorarnos a nosotros mismos. (APLAUSOS)
Quiero finalmente agradecer el esfuerzo que todos y cada uno de ustedes ha hecho para acercarse a este congreso, quiero felicitar a los hombres y a las mujeres de la Secretaría de Agricultura, a Carlos, a Carla, a Guillermo, hombres y mujeres comprometidos con lo que hacen, no solamente son profesionales, la técnica te permite contar o diseñar los instrumentos, pero hay cosas que no te las enseñan en la universidad, se sienten acá, el compromiso con lo nuestro, con los más vulnerables, con los que más necesitan, con al tierra, con el medio ambiente. (APLAUSOS)
Por eso a seguir trabajando y hoy, más que nunca, con la convicción de que la construcción colectiva es el camino que tenemos que tener todos los argentinos.
Gracias y muy buenas noches a todos, gracias a Misiones, gracias a Entre Ríos, gracias a Corrientes, Córdoba, Santa Fe, Salta, Santiago del Estero, Jujuy, La Rioja, Mendoza, gracias a todos, y si me olvidé de alguno perdónenme, pero los tengo a todos en el corazón. Muchas gracias.
