por GABY Lun Oct 15, 2012 5:17 pmPablo Javier Gaona, hijo de Ricardo Gaona Paiva y María Rosa Miranda, recuperó su identidad en agosto
Detuvieron a los apropiadores del último nieto restituido
La jueza procesó con prisión preventiva al coronel (r) Héctor Girbone, acusado de entregar al niño, y a Salvador Girbone y su mujer, Raquel Alí Ahmed, que lo inscribieron como propio.
Los apropiadores del último nieto restituido Pablo Javier Gaona Miranda fueron procesados por la jueza federal María Romilda Servini de Cubría por la sustracción, ocultación y retención del niño, quien fue secuestrado junto a sus padres el 14 de mayo de 1978.
En la resolución, la magistrada dictó los procesamientos con prisión preventiva al coronel retirado Héctor Girbone, acusado de ser quien entregó al niño a su primo, Salvador Girbone y a su mujer Raquel Ali Ahmed, procesados por inscribir al joven como hijo biológico y bajo el nombre falso de Leandro Daniel Girbone.
El pasado 7 de agosto, la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo anunció la identificación de Pablo Javier Gaona Miranda, quien se convirtió en el nieto 106 en ser hallado por la institución.
Allí se conoció que con un mes de vida el niño fue secuestrado junto a sus padres Ricardo Gaona Paiva y María Rosa Miranda, ambos militantes del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP).
El matrimonio permanece desaparecido mientras que el destino de Pablo Javier fue la casa de Girbone y Ahmed.
El entregador habría sido el coronel retirado del Ejército Héctor Girbone, quien al momento del secuestro estuvo destinado a la Escuela de Caballería en Campo de Mayo. Su paso por esa dependencia, donde funcionó un centro clandestino de detención, también da indicios del lugar donde pueden haber estado detenidos los padres del niño.
El joven restituido siempre supo que no era hijo biológico de sus apropiadores, pero le habían dicho que lo habían traído de la provincia de Misiones. “Siempre supe que era hijo adoptivo, y al tener conocimiento de que el primo de mi padre era militar, supuse que podía ser hijo de desaparecidos.
Las primeras dudas surgen en el año 2003 pero hasta el 2008 fue un proceso interno.
A fines de ese año le planteo a mi madre la necesidad de saber quién era yo y específicamente le dije que creía que podía ser hijo de desaparecidos y quería ir a Abuelas a hacerme un ADN.
Ella me dijo que sospechaba también.
Después de ese momento, hasta el día que me decido a ir a Abuelas, que fue el 20 de junio de este año, lo que hice fue informarme, tener un proceso interno, para tomar la decisión definitiva de ir a hacerme el análisis”, contó Pablo Javier ante la jueza de instrucción.
También aclaró que después del examen genético se enteró por sus apropiadores que lo fueron a buscar a “una casa de monjas o un Instituto en San Fernando” donde lo vieron por primera vez.
“Esto lo supe después de los resultados de ADN.
Héctor Girbone es el que avisa que en ese lugar había varios chicos.
Mi madre no podía quedar embarazada y quería un varón, entonces ahí es donde tiene el contacto conmigo, y por lo que sé me anotaron como hijo propio”, explicó.
En el procesamiento, Servini de Cubría tuvo por acreditado que “Salvador Girbone habría alterado el estado civil de Pablo Javier Gaona mediante su inscripción en la Delegación San Fernando del Registro de las Personas de la Provincia de Buenos Aires el 8 de agosto año 1978 bajo el nombre de Leandro Daniel Girbone.”
También determinó que “sin tener por acreditados los pormenores de cómo llegó el entonces menor a la familia Girbone-Alí Ahmed, se encuentra probado que Pablo Javier Gaona fue sustraído de la esfera de custodia de sus padres y/o de quienes debían detentarla en su ausencia y entregado al matrimonio antes mencionado, por Héctor Salvador Girbone”.
Además del procesamiento con prisión preventiva, la magistrada dispuso trabar embargos sobre los bienes del matrimonio de Girbone y Amhed por 850 mil pesos cada uno y de Héctor Girbone por 1,35 millones de pesos
http://tiempo.infonews.com
Detuvieron a los apropiadores del último nieto restituido
La jueza procesó con prisión preventiva al coronel (r) Héctor Girbone, acusado de entregar al niño, y a Salvador Girbone y su mujer, Raquel Alí Ahmed, que lo inscribieron como propio.
Los apropiadores del último nieto restituido Pablo Javier Gaona Miranda fueron procesados por la jueza federal María Romilda Servini de Cubría por la sustracción, ocultación y retención del niño, quien fue secuestrado junto a sus padres el 14 de mayo de 1978.
En la resolución, la magistrada dictó los procesamientos con prisión preventiva al coronel retirado Héctor Girbone, acusado de ser quien entregó al niño a su primo, Salvador Girbone y a su mujer Raquel Ali Ahmed, procesados por inscribir al joven como hijo biológico y bajo el nombre falso de Leandro Daniel Girbone.
El pasado 7 de agosto, la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo anunció la identificación de Pablo Javier Gaona Miranda, quien se convirtió en el nieto 106 en ser hallado por la institución.
Allí se conoció que con un mes de vida el niño fue secuestrado junto a sus padres Ricardo Gaona Paiva y María Rosa Miranda, ambos militantes del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP).
El matrimonio permanece desaparecido mientras que el destino de Pablo Javier fue la casa de Girbone y Ahmed.
El entregador habría sido el coronel retirado del Ejército Héctor Girbone, quien al momento del secuestro estuvo destinado a la Escuela de Caballería en Campo de Mayo. Su paso por esa dependencia, donde funcionó un centro clandestino de detención, también da indicios del lugar donde pueden haber estado detenidos los padres del niño.
El joven restituido siempre supo que no era hijo biológico de sus apropiadores, pero le habían dicho que lo habían traído de la provincia de Misiones. “Siempre supe que era hijo adoptivo, y al tener conocimiento de que el primo de mi padre era militar, supuse que podía ser hijo de desaparecidos.
Las primeras dudas surgen en el año 2003 pero hasta el 2008 fue un proceso interno.
A fines de ese año le planteo a mi madre la necesidad de saber quién era yo y específicamente le dije que creía que podía ser hijo de desaparecidos y quería ir a Abuelas a hacerme un ADN.
Ella me dijo que sospechaba también.
Después de ese momento, hasta el día que me decido a ir a Abuelas, que fue el 20 de junio de este año, lo que hice fue informarme, tener un proceso interno, para tomar la decisión definitiva de ir a hacerme el análisis”, contó Pablo Javier ante la jueza de instrucción.
También aclaró que después del examen genético se enteró por sus apropiadores que lo fueron a buscar a “una casa de monjas o un Instituto en San Fernando” donde lo vieron por primera vez.
“Esto lo supe después de los resultados de ADN.
Héctor Girbone es el que avisa que en ese lugar había varios chicos.
Mi madre no podía quedar embarazada y quería un varón, entonces ahí es donde tiene el contacto conmigo, y por lo que sé me anotaron como hijo propio”, explicó.
En el procesamiento, Servini de Cubría tuvo por acreditado que “Salvador Girbone habría alterado el estado civil de Pablo Javier Gaona mediante su inscripción en la Delegación San Fernando del Registro de las Personas de la Provincia de Buenos Aires el 8 de agosto año 1978 bajo el nombre de Leandro Daniel Girbone.”
También determinó que “sin tener por acreditados los pormenores de cómo llegó el entonces menor a la familia Girbone-Alí Ahmed, se encuentra probado que Pablo Javier Gaona fue sustraído de la esfera de custodia de sus padres y/o de quienes debían detentarla en su ausencia y entregado al matrimonio antes mencionado, por Héctor Salvador Girbone”.
Además del procesamiento con prisión preventiva, la magistrada dispuso trabar embargos sobre los bienes del matrimonio de Girbone y Amhed por 850 mil pesos cada uno y de Héctor Girbone por 1,35 millones de pesos
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