por GABY Miér Sep 26, 2012 12:01 pmCon la declaración testimonial del hijo del empresario Julio Gallego Soto comenzó en Comodoro Py el juicio oral por delitos de lesa humanidad que tiene como único acusado al represor y ex agente de inteligencia Hugo Pedro Vergez.
Además del secuestro y desaparición de Gallego Soto, Vergez, quien se negó a declarar ante el Tribunal Oral Federal Nº 5, está acusado por otros tres casos relacionados: la desaparición de Carlos Casariego de Bel, funcionario del Ministerio de Economía que se opuso a la nacionalización de la Compañía Ítalo Argentina de Electricidad que impulsó el ministro José Alfredo Martínez de Hoz; además de la desaparición de Javier Coccoz, responsable de inteligencia del ERP, y la privación ilegítima de la libertad de su esposa, Cristina Zamponi, retenida en su domicilio y obligada a abandonar el país con rumbo a Europa junto a su hijo.
En los cuatro casos que integran el juicio se probó durante la instrucción la participación de Vergez como integrante del Batallón de Inteligencia 601 del Ejército.
La primera de las víctimas fue Coccoz. Secuestrado el 11 de mayo de 1977, el cordobés Vergez, ex director del centro clandestino de detención La Perla, fue el encargado de torturar al entonces jefe de inteligencia del ERP.
A partir de su secuestro, "se detuvieron a las personas que de alguna manera se encontraban al momento vinculadas a él, Julio Gallego Soto (el 4 de Julio de 1977), Juan Carlos Casariego de Bel (15 de junio de 1977) y Rafael Perrota (entonces propietario del diario El Cronista Comercial, cuyo caso no ingresó al juicio), quienes actualmente permanecen en calidad de detenidos desaparecidos", señala el texto de la elevación a juicio.
Allí se destaca también que inmediatamente de ocurrido el secuestro de Coccoz, Vergez se presentó en el domicilio de los padres de su esposa, Zamponi, quien permaneció cautiva en esa casa entre el 11 de junio y el 9 de julio de 1977 hasta su exilio a Europa. Según se desprende de lo investigado durante la instrucción, Coccoz negoció la salida del país de su esposa a cambio de información, en este caso la identidad de tres de sus fuentes extrapartidarias. "Las constancias del sumario permiten tener por acreditado que tanto Perrota como Casariego de Bel, así también como Gallego Soto pertenecían a la red de "contactos" extrapartidarios de 'Pancho' (alias de Coccoz), personas que en razón de su situación personal y/o profesional, podían aportarle información que este considerara valiosa para su actividad", se señaló en la elevación.
Integrante
Batallón 601. Vergez actuó en los casos como miembro del Batallón de Inteligencia 601 del Ejército.
Por: Gerardo Aranguren
http://tiempo.infonews.com
Además del secuestro y desaparición de Gallego Soto, Vergez, quien se negó a declarar ante el Tribunal Oral Federal Nº 5, está acusado por otros tres casos relacionados: la desaparición de Carlos Casariego de Bel, funcionario del Ministerio de Economía que se opuso a la nacionalización de la Compañía Ítalo Argentina de Electricidad que impulsó el ministro José Alfredo Martínez de Hoz; además de la desaparición de Javier Coccoz, responsable de inteligencia del ERP, y la privación ilegítima de la libertad de su esposa, Cristina Zamponi, retenida en su domicilio y obligada a abandonar el país con rumbo a Europa junto a su hijo.
En los cuatro casos que integran el juicio se probó durante la instrucción la participación de Vergez como integrante del Batallón de Inteligencia 601 del Ejército.
La primera de las víctimas fue Coccoz. Secuestrado el 11 de mayo de 1977, el cordobés Vergez, ex director del centro clandestino de detención La Perla, fue el encargado de torturar al entonces jefe de inteligencia del ERP.
A partir de su secuestro, "se detuvieron a las personas que de alguna manera se encontraban al momento vinculadas a él, Julio Gallego Soto (el 4 de Julio de 1977), Juan Carlos Casariego de Bel (15 de junio de 1977) y Rafael Perrota (entonces propietario del diario El Cronista Comercial, cuyo caso no ingresó al juicio), quienes actualmente permanecen en calidad de detenidos desaparecidos", señala el texto de la elevación a juicio.
Allí se destaca también que inmediatamente de ocurrido el secuestro de Coccoz, Vergez se presentó en el domicilio de los padres de su esposa, Zamponi, quien permaneció cautiva en esa casa entre el 11 de junio y el 9 de julio de 1977 hasta su exilio a Europa. Según se desprende de lo investigado durante la instrucción, Coccoz negoció la salida del país de su esposa a cambio de información, en este caso la identidad de tres de sus fuentes extrapartidarias. "Las constancias del sumario permiten tener por acreditado que tanto Perrota como Casariego de Bel, así también como Gallego Soto pertenecían a la red de "contactos" extrapartidarios de 'Pancho' (alias de Coccoz), personas que en razón de su situación personal y/o profesional, podían aportarle información que este considerara valiosa para su actividad", se señaló en la elevación.
Integrante
Batallón 601. Vergez actuó en los casos como miembro del Batallón de Inteligencia 601 del Ejército.
Por: Gerardo Aranguren
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