por GABY Miér Sep 12, 2012 11:10 pmLos docentes de Chicago lanzaron el primer paro en un cuarto de siglo
Los sindicatos no aceptaron las condiciones que pretendía Rahm Emanuel, ex jefe de Gabinete de Obama. Son
más de 29 mil maestros y los afectados son 350 mil niños de niveles preescolar al secundario. Plan de emergencia.
Por primera vez en el último cuarto de siglo, los docentes de las escuelas públicas de Chicago, Illinois –el tercer distrito escolar más importante de Estados Unidos–, iniciaron ayer una huelga en reclamo de un aumento de sueldos, garantías de estabilidad en el empleo y un nuevo sistema de evaluación de la calidad de su trabajo. Los sindicatos anunciaron la medida el domingo de noche, después de fracasar las negociaciones con las autoridades del área, pese a las reuniones mantenidas durante el fin de semana.
El paro afecta a unos 350 mil niños de los niveles preescolar, primario y secundario, lo que alteró la vida de miles de familias y obligó a la implementación de un programa de emergencia a un costo de 25 millones de dólares. En un país raras veces enfrentado a situaciones sociales de estas características, fueron las iglesias, los centros comunitarios y algunas entidades públicas las que debieron instrumentar ayer mismo ese plan financiado con recursos estatales.
Rahm Emanuel, alcalde demócrata de Chicago y ex jefe de Gabinete de la Casa Blanca, condenó la decisión sindical y dijo que la huelga es "innecesaria y evitable". A su juicio, "de haber existido buena voluntad" de parte de los docentes, las diferencias podrían haberse resuelto por la vía del diálogo. A ocho semanas de las elecciones presidenciales y con el recuerdo de los 19 días de huelga que los docentes de Chicago mantuvieron en 1987, Emanuel optó por derivar responsabilidades.
Si bien en los últimos meses las partes habían logrado un acercamiento en el aspecto salarial, en otros puntos las diferencias incluso se acentuaron, como en lo que tiene que ver con los posibles cambios en el nuevo sistema de evaluación de los maestros. Así fue que se llegó a la jornada de ayer, en la que algo más de 29 mil docentes se hartaron de esperar e iniciaron la huelga. "Ningún afiliado al sindicato está hoy en las aulas, hubiésemos preferido evitar esta situación pero fue imposible", dijo Karen Lewis, presidenta del sindicato docente.
Emanuel forma parte de un grupo de alcaldes de ciudades de primer nivel que adoptaron reformas escolares que fueron aprobadas por la secretaria de Educación de Obama, Arne Duncan, ex titular de la Dirección de Escuelas de Chicago. Para algunos analistas, la lucha abierta ayer por los docentes del estado, y observada con indisimulada simpatía por los líderes del Partido Republicano, amenaza con complicar las relaciones entre Obama y su partido justo antes de las presidenciales del 6 de noviembre.
Si bien se espera que Obama gane en Chicago y en todo el estado de Illinois, el malestar de los docentes podría extenderse a estados vecinos como Wisconsin, Michigan y Ohio, donde la disputa con el republicano Mitt Romney no tiene un final tan claro. Emanuel tuvo en cuenta este cuadro de situación, de ahí que en todo momento trató de evitar la confrontación y creyó acercarse a un acuerdo cuando les ofreció a los docentes un aumento del 3% para este año y otro del 2% para los próximos tres años.
http://tiempo.infonews.com
Los sindicatos no aceptaron las condiciones que pretendía Rahm Emanuel, ex jefe de Gabinete de Obama. Son
más de 29 mil maestros y los afectados son 350 mil niños de niveles preescolar al secundario. Plan de emergencia.
Por primera vez en el último cuarto de siglo, los docentes de las escuelas públicas de Chicago, Illinois –el tercer distrito escolar más importante de Estados Unidos–, iniciaron ayer una huelga en reclamo de un aumento de sueldos, garantías de estabilidad en el empleo y un nuevo sistema de evaluación de la calidad de su trabajo. Los sindicatos anunciaron la medida el domingo de noche, después de fracasar las negociaciones con las autoridades del área, pese a las reuniones mantenidas durante el fin de semana.
El paro afecta a unos 350 mil niños de los niveles preescolar, primario y secundario, lo que alteró la vida de miles de familias y obligó a la implementación de un programa de emergencia a un costo de 25 millones de dólares. En un país raras veces enfrentado a situaciones sociales de estas características, fueron las iglesias, los centros comunitarios y algunas entidades públicas las que debieron instrumentar ayer mismo ese plan financiado con recursos estatales.
Rahm Emanuel, alcalde demócrata de Chicago y ex jefe de Gabinete de la Casa Blanca, condenó la decisión sindical y dijo que la huelga es "innecesaria y evitable". A su juicio, "de haber existido buena voluntad" de parte de los docentes, las diferencias podrían haberse resuelto por la vía del diálogo. A ocho semanas de las elecciones presidenciales y con el recuerdo de los 19 días de huelga que los docentes de Chicago mantuvieron en 1987, Emanuel optó por derivar responsabilidades.
Si bien en los últimos meses las partes habían logrado un acercamiento en el aspecto salarial, en otros puntos las diferencias incluso se acentuaron, como en lo que tiene que ver con los posibles cambios en el nuevo sistema de evaluación de los maestros. Así fue que se llegó a la jornada de ayer, en la que algo más de 29 mil docentes se hartaron de esperar e iniciaron la huelga. "Ningún afiliado al sindicato está hoy en las aulas, hubiésemos preferido evitar esta situación pero fue imposible", dijo Karen Lewis, presidenta del sindicato docente.
Emanuel forma parte de un grupo de alcaldes de ciudades de primer nivel que adoptaron reformas escolares que fueron aprobadas por la secretaria de Educación de Obama, Arne Duncan, ex titular de la Dirección de Escuelas de Chicago. Para algunos analistas, la lucha abierta ayer por los docentes del estado, y observada con indisimulada simpatía por los líderes del Partido Republicano, amenaza con complicar las relaciones entre Obama y su partido justo antes de las presidenciales del 6 de noviembre.
Si bien se espera que Obama gane en Chicago y en todo el estado de Illinois, el malestar de los docentes podría extenderse a estados vecinos como Wisconsin, Michigan y Ohio, donde la disputa con el republicano Mitt Romney no tiene un final tan claro. Emanuel tuvo en cuenta este cuadro de situación, de ahí que en todo momento trató de evitar la confrontación y creyó acercarse a un acuerdo cuando les ofreció a los docentes un aumento del 3% para este año y otro del 2% para los próximos tres años.
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