por GABY Jue Jul 26, 2012 1:09 pmLa advertencia a los buques que navegan en la zona fue lanzada por el Servicio de Hidrografía Naval. Se produjo el 12 de julio y culminará mañana a las 23. El hecho refuerza la denuncia del gobierno sobre la militarización de Malvinas. Cancillería repudió las acciones
El Reino Unido de Gran Bretaña parece decidido a desafiar no sólo las resoluciones de la Organización de Naciones Unidas sobre la cuestión de soberanía, sino también la denuncia interpuesta por la Argentina ante ese organismo por la "militarización" del Atlántico Sur. Desde el lunes de la semana pasada y hasta mañana por la noche, las fuerzas militares inglesas desplegadas en Malvinas se encuentran realizando ejercicios militares que incluyen el lanzamiento de misiles en las islas. Así lo advirtió un aviso a los navegantes, originado en el Servicio de Hidrografía Naval dependiente del Ministerio de Defensa de la Nación, cuya misión es advertir del peligro a las embarcaciones que puedan estar en la zona. El gobierno argentino respondió con dureza frente a la actitud británica y expresó que "rechaza y condena" las maniobras bélicas, a las que consideró "conductas de provocación".
La alerta data del 12 de julio pasado, a través del parte hidrográfico 0097, y su vigencia se extiende hasta las 23 horas del viernes para las zonas aledañas a Islas Malvinas, en particular a un área delimitada por coordenadas específicas dentro y fuera del territorio insular, en torno a la Isla Soledad. "Ejercicios de lanzamientos de misiles, días 16 al 27 de julio de 2012, desde las 10:00 a las 22:00 hs", indica el motivo de la comunicación, que tiene como fuente la información suministrada directamente desde Londres, a través de su propio servicio de hidrografía. La Argentina, de acuerdo a protocolos marítimos internacionales, tiene la obligación de reproducir el mensaje, en este caso hasta las once de la noche del 27 de julio, momento en el que, se supone, terminen las prácticas militares. "Los buques se mantendrán fuera del área establecida", concluye la advertencia.
Según confirmaron a Tiempo Argentino fuentes de la cartera de Defensa, el uso de misiles para prácticas militares en Malvinas registra antecedentes, al menos una vez por año, desde 2010 para la misma época, lo cual no implica que también se hubieran efectuado lanzamientos sin un aviso por parte de las autoridades inglesas. El primer ámbito en donde se alertó de la situación fue el sitio web perteneciente a la Fundación Nuestro Mar –organización no gubernamental dedicada a asuntos de investigación y preservación del espacio acuático– que recogió el boletín publicado por hidrografía.
La Argentina tiene desde 1975 el rol de coordinador del área denominada "Navarea VI", conformada no sólo por aguas territoriales, sino también por las correspondientes al Uruguay y al Atlántico Sur Occidental. Las transmisiones de los radioavisos náuticos se realizan dos veces por día –en español y en inglés para buques extranjeros– a través de un servicio satelital que en alta frecuencia recorre las estaciones costeras de la Prefectura Nacional Argentina, con un alcance de hasta 700 millas más allá de los límites bajo su responsabilidad. El área de Hidrografía se limita a la difusión del mensaje sobre los posibles peligros que pueden presentarse para las embarcaciones, con el objetivo de alertarlos y así evitar accidentes, por lo que aún no es posible corroborar si efectivamente se hicieron los lanzamientos de los misiles.
REACCIÓN OFICIAL.
Mediante un comunicado, el gobierno argentino condenó el lanzamiento de misiles, al sostener que "a 30 años de la guerra, el Reino Unido sigue apostando a las armas". Se advirtió, a través de la Cancillería, que "ante una nueva demostración y ejercicio de fuerza por parte del gobierno británico, el país rechaza y condena los ejercicios militares con lanzamiento de misiles desde el territorio de las Islas Malvinas". A su vez consideró que estas maniobras constituyen una "amenaza" a la Argentina y a América Latina, ya que "pone en riesgo la seguridad de todas las naves que se encuentran en el área". Pero que también "son contrarias a la voluntad de los países de la región, los que han rechazado dichos ejercicios militares a través de múltiples pronunciamientos", como los comprendidos dentro de foros del Mercosur, Unasur y el Grupo Río. "Es condenable también que el Reino Unido desoiga el llamado de la región y persista con sus conductas de provocación", concluyó el duro comunicado, que subrayó una vez más el llamado al diálogo ignorado por Inglaterra.
MILITARIZACIÓN.
Este episodio se suma a la escalada bélica encabezada por el Reino Unido en la zona de las Malvinas, denunciada por nuestro país. A principios de febrero, el canciller argentino Héctor Timerman viajó especialmente a Nueva York para entregar al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, un documento en el que la Argentina rechazaba la movilización de tropas británicas hacia el Atlántico Sur. La presentación incluyó la posible introducción de armamento nuclear en la zona y la queja por el envío del destructor HMS Dauntless, el más poderoso de la flota británica. En los días previos, Timerman denunció en la Cumbre de Seguridad Nuclear de Seúl "recientes episodios de militarización" en las islas, a partir del envío de un submarino nuclear británico, y exigió a Londres que "confirme la ausencia de armas nucleares" en Malvinas, algo que nunca sucedió. La Argentina reiteró la queja ante el Comité de Descolonización del organismo, previo al discurso en ese foro de la presidenta Cristina Fernández, el pasado 14 de junio. «
Mensaje de Rousseff a Cameron
La presidenta de Brasil Dilma Rousseff mantuvo ayer un encuentro con el primer ministro británico, David Cameron, oportunidad que aprovechó para recordarle que su gobierno es solidario con la Argentina respecto de la demanda por sus derechos de soberanía sobre las Islas Malvinas, Sandwich y Georgias del Sur y los espacios marítimos circundantes .
Así lo informó ayer el ministro de Relaciones Exteriores del país vecino, Antonio Patriota, al término de una reunión de la que participó junto a Rousseff y Cameron, en la residencia oficial del premier inglés, en Londres.
El encuentro, del que participó además el ministro de Educación de Brasil, Aloizio Mercadante, fue celebrado en el marco de una visita de tres días que la mandataria brasileña, junto a una nutrida comitiva, realiza en Londres, y que incluye su participación, mañana, en los actos de apertura de los Juegos Olímpicos.
El explícito respaldo del gobierno brasileño al reclamo argentino forma parte de la activa política regional para presionar al gobierno británico a cumplir con las resoluciones de la Asamblea General de la Organización y de su Comité de Descolonización para que Londres se avenga a dialogar de modo de encontrar una resolución pacífica y duradera al conflicto. El reclamo de la Argentina ha cosechado en los últimos años un fuerte respaldo internacional, en particular en América del Sur donde este apoyo se tradujo en acciones concretas como la decisión de Uruguay, Brasil, Chile y Perú de no admitir en sus puertos buques con bandera de Malvinas.
El Reino Unido de Gran Bretaña parece decidido a desafiar no sólo las resoluciones de la Organización de Naciones Unidas sobre la cuestión de soberanía, sino también la denuncia interpuesta por la Argentina ante ese organismo por la "militarización" del Atlántico Sur. Desde el lunes de la semana pasada y hasta mañana por la noche, las fuerzas militares inglesas desplegadas en Malvinas se encuentran realizando ejercicios militares que incluyen el lanzamiento de misiles en las islas. Así lo advirtió un aviso a los navegantes, originado en el Servicio de Hidrografía Naval dependiente del Ministerio de Defensa de la Nación, cuya misión es advertir del peligro a las embarcaciones que puedan estar en la zona. El gobierno argentino respondió con dureza frente a la actitud británica y expresó que "rechaza y condena" las maniobras bélicas, a las que consideró "conductas de provocación".
La alerta data del 12 de julio pasado, a través del parte hidrográfico 0097, y su vigencia se extiende hasta las 23 horas del viernes para las zonas aledañas a Islas Malvinas, en particular a un área delimitada por coordenadas específicas dentro y fuera del territorio insular, en torno a la Isla Soledad. "Ejercicios de lanzamientos de misiles, días 16 al 27 de julio de 2012, desde las 10:00 a las 22:00 hs", indica el motivo de la comunicación, que tiene como fuente la información suministrada directamente desde Londres, a través de su propio servicio de hidrografía. La Argentina, de acuerdo a protocolos marítimos internacionales, tiene la obligación de reproducir el mensaje, en este caso hasta las once de la noche del 27 de julio, momento en el que, se supone, terminen las prácticas militares. "Los buques se mantendrán fuera del área establecida", concluye la advertencia.
Según confirmaron a Tiempo Argentino fuentes de la cartera de Defensa, el uso de misiles para prácticas militares en Malvinas registra antecedentes, al menos una vez por año, desde 2010 para la misma época, lo cual no implica que también se hubieran efectuado lanzamientos sin un aviso por parte de las autoridades inglesas. El primer ámbito en donde se alertó de la situación fue el sitio web perteneciente a la Fundación Nuestro Mar –organización no gubernamental dedicada a asuntos de investigación y preservación del espacio acuático– que recogió el boletín publicado por hidrografía.
La Argentina tiene desde 1975 el rol de coordinador del área denominada "Navarea VI", conformada no sólo por aguas territoriales, sino también por las correspondientes al Uruguay y al Atlántico Sur Occidental. Las transmisiones de los radioavisos náuticos se realizan dos veces por día –en español y en inglés para buques extranjeros– a través de un servicio satelital que en alta frecuencia recorre las estaciones costeras de la Prefectura Nacional Argentina, con un alcance de hasta 700 millas más allá de los límites bajo su responsabilidad. El área de Hidrografía se limita a la difusión del mensaje sobre los posibles peligros que pueden presentarse para las embarcaciones, con el objetivo de alertarlos y así evitar accidentes, por lo que aún no es posible corroborar si efectivamente se hicieron los lanzamientos de los misiles.
REACCIÓN OFICIAL.
Mediante un comunicado, el gobierno argentino condenó el lanzamiento de misiles, al sostener que "a 30 años de la guerra, el Reino Unido sigue apostando a las armas". Se advirtió, a través de la Cancillería, que "ante una nueva demostración y ejercicio de fuerza por parte del gobierno británico, el país rechaza y condena los ejercicios militares con lanzamiento de misiles desde el territorio de las Islas Malvinas". A su vez consideró que estas maniobras constituyen una "amenaza" a la Argentina y a América Latina, ya que "pone en riesgo la seguridad de todas las naves que se encuentran en el área". Pero que también "son contrarias a la voluntad de los países de la región, los que han rechazado dichos ejercicios militares a través de múltiples pronunciamientos", como los comprendidos dentro de foros del Mercosur, Unasur y el Grupo Río. "Es condenable también que el Reino Unido desoiga el llamado de la región y persista con sus conductas de provocación", concluyó el duro comunicado, que subrayó una vez más el llamado al diálogo ignorado por Inglaterra.
MILITARIZACIÓN.
Este episodio se suma a la escalada bélica encabezada por el Reino Unido en la zona de las Malvinas, denunciada por nuestro país. A principios de febrero, el canciller argentino Héctor Timerman viajó especialmente a Nueva York para entregar al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, un documento en el que la Argentina rechazaba la movilización de tropas británicas hacia el Atlántico Sur. La presentación incluyó la posible introducción de armamento nuclear en la zona y la queja por el envío del destructor HMS Dauntless, el más poderoso de la flota británica. En los días previos, Timerman denunció en la Cumbre de Seguridad Nuclear de Seúl "recientes episodios de militarización" en las islas, a partir del envío de un submarino nuclear británico, y exigió a Londres que "confirme la ausencia de armas nucleares" en Malvinas, algo que nunca sucedió. La Argentina reiteró la queja ante el Comité de Descolonización del organismo, previo al discurso en ese foro de la presidenta Cristina Fernández, el pasado 14 de junio. «
Mensaje de Rousseff a Cameron
La presidenta de Brasil Dilma Rousseff mantuvo ayer un encuentro con el primer ministro británico, David Cameron, oportunidad que aprovechó para recordarle que su gobierno es solidario con la Argentina respecto de la demanda por sus derechos de soberanía sobre las Islas Malvinas, Sandwich y Georgias del Sur y los espacios marítimos circundantes .
Así lo informó ayer el ministro de Relaciones Exteriores del país vecino, Antonio Patriota, al término de una reunión de la que participó junto a Rousseff y Cameron, en la residencia oficial del premier inglés, en Londres.
El encuentro, del que participó además el ministro de Educación de Brasil, Aloizio Mercadante, fue celebrado en el marco de una visita de tres días que la mandataria brasileña, junto a una nutrida comitiva, realiza en Londres, y que incluye su participación, mañana, en los actos de apertura de los Juegos Olímpicos.
El explícito respaldo del gobierno brasileño al reclamo argentino forma parte de la activa política regional para presionar al gobierno británico a cumplir con las resoluciones de la Asamblea General de la Organización y de su Comité de Descolonización para que Londres se avenga a dialogar de modo de encontrar una resolución pacífica y duradera al conflicto. El reclamo de la Argentina ha cosechado en los últimos años un fuerte respaldo internacional, en particular en América del Sur donde este apoyo se tradujo en acciones concretas como la decisión de Uruguay, Brasil, Chile y Perú de no admitir en sus puertos buques con bandera de Malvinas.
