por GABY Sáb Abr 21, 2012 4:30 pmPALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN CRISTINA FERNÁNDEZ EN EL ACTO DE ANUNCIOS DE LAS MEDIDAS DISPUESTAS POR EL GOBIERNO NACIONAL PARA LA INDUSTRIA FRIGORÍFICA, EN EL SALÓN DE LAS MUJERES ARGENTINAS, DE CASA ROSADA.
Gracias, muchas gracias, muy buenas tardes a todos y a todas; señor vicepresidente de la Nación; señor presidente de la Cámara de Diputados; señores dirigentes de la Confederación General del Trabajo; titulares de los distintos gremios que la componen; señor titular de la CTA; señor titular de la Unión Industrial Argentina; los invitados especiales del día de la fecha; señor secretario general del Sindicato de la Carne y el señor secretario de la Cámara Exportadora: ustedes dirán qué hago yo con esta caja de Milka acá. Bueno, son chocolates, ya los conocen todos, pero los volvimos a fabricar en la República Argentina. (Aplausos). Así que no pienso convidarles les aclaro, me la llevo toda para mi casa porque me encantan los chocolates Milka, pero me acuerdo que un día comí un chocolate muy rico y llamé muy enojado a Débora – dónde estás Débora – ahí, porque bueno era rico el chocolate, pero no estaba fabricado acá. Estaba fabricado por acá cerca, pero no en la Argentina, no importa dónde y me enojé mucho. Y hoy el Secretario de Comercio vino con la primera caja que sale de la fábrica de chocolates, hecho en el país. (Aplausos).
Y la verdad que en un país donde la industria lechera, donde la leche es uno de nuestros productos básicos, donde hemos aumentado además la producción a niveles record, más de 11 mil millones de litros, el año pasado, 11.600 millones de litros para ser más exacto, la verdad que era imperdonable que no estuviéramos haciendo chocolates en la República Argentina, estamos haciendo otros, pero queríamos que hiciéramos estos: los de la vaquita violeta y blanca.
Y hablando de vaquitas, estamos anunciando en el día de la fecha una importante medida fiscal vinculada a la reactivación del sector de la industria frigorífica, esto es la industrialización de la carne. La medida consiste básicamente en una reducción de los derechos de exportación del 15%, que hoy tienen lo que denominamos termoprocesados, son los que se utiliza la denominada vaca vieja. Si habremos hablado de la vaca vieja - Dios mío – la nueva, de la vieja, de la mediana; de la vaca vieja que es lo que antes conocíamos como viandadas – yo cuando era chica comía la viandada- que son los enlatados y el extracto también de carne que se vende a granel y que hoy está en un 15%. Y le hemos hecho una reducción, durante un año, al 5% para reactivar la industria frigorífica. (Aplausos)
Ustedes saben que la de los termoprocesados es precisamente dentro del sector frigorífico la que más cantidad de valor agrega al producto cárnico; esto es una transferencia de 12 millones y medio de dólares al sector, pero también vamos a pedirle cosas porque vamos a conformar una comisión, integrada por la Secretaría de Planeamiento Económico, o sea por un sector del Ministerio de Economía; también la Secretaría de Comercio; Ministerio de Trabajo; Industria y seguramente los informes que nos hará la AFIP acerca de la cantidad de empleados que tiene cada firma porque vamos a exigir el mantenimiento y aumento de las plantas, porque si hay una transferencia importante en materia de recursos públicos - porque después de todo los derechos de exportación son tributos que van a la sociedad - vamos también a reclamar y exigir que precisamente se mantengan e incrementen las plantas de personal del sector vinculado a esto (Aplausos).
El mismo será a través de un monitoreo mensual, que estará a cargo de varios funcionarios. Yo siempre pongo a varios funcionarios, dejar en manos de un solo funcionario las cosas nunca es conveniente, siempre es mejor que varios controlen porque da más resultado, lo he comprobado. Entonces lo que es importante es saber que este renunciamiento del sector público a percibir lo que legítimamente le corresponde tiene que tener la contrapartida en el sector empresario precisamente porque estamos transfiriendo una importante cantidad de dinero y también se va a exigir incrementar un 5% la exportación, de manera tal de que todo es que articulado.
Yo escuchaba al señor titular, al Secretario de la Carne pedir participación de los trabajadores en el Instituto Nacional de la Carne, eso está a través de una ley. Creo que mañana mismo podemos enviar el proyecto al Congreso para que los trabajadores participen (Aplausos).
Es muy cortante que uno pueda advertir porque ahora se ha recuperado muchísimo la ganadería, hay una capitalización del sector productor, que como está con muy buena pastura y con muy buenos precios la producción vende menos o más caro y entonces comienzan los productos del otro lado. Vamos a hablar las cosas como son en la Argentina porque las cosas no son gratis ni mágicas; más o menos pasa lo mismo con algunos problemas que tenemos con la hierba ahora. Le hemos aumentado un 100%, a 1.70 el kilo de hoja, ¿no es cierto? al pequeño productor yerbatero, de Misiones, y vamos a tratar de que esto sea absorbido por la parte de cadena de valor - por lo menos en una gran parte - que es la que la industrializa, que son grandes empresas: tres, cuatro, o cinco grandes empresas y esperemos que no nos harán hacer faltar la yerba, porque si no va a haber problemas y vamos a aplicar - si es necesario - la Ley de Abastecimiento porque no es posible que con las extraordinarias rentabilidades que han tenido todos los sectores hagan esto. (Aplausos). Pero veamos cómo es el tema, porque muchas veces escuchamos solamente a un sector y tenemos que saber que cuando se le aumenta al productor - sea de carne, que obviamente es un productor de mucho más ingresos que el productor yerbatero, sin lugar a dudas - siempre esto repercute en toda la cadena y terminar repercutiendo en el punto final que es la góndola, esto es el consumidor. Nada es gratis y nada es mágico.
Por eso hay que tratar de articular todos los intereses para que podamos seguir funcionando como país. Y la industria cárnica, también la frigoríficos han tenido importantes ganancias otrora, entonces también es necesario que en este momento pongan el esfuerzo, junto con el Estado, si hubo rentabilidades muy buenas en otras etapas para mantener el nivel de trabajo, que es mantener el nivel de consumo, que es mantener el nivel de la actividad económica. (Aplausos).
Porque cuando un trabajador de un frigorífico pierde el empleo es un trabajador que no va a comprar otros productos, que hacen otros trabajadores, o que generan otros empresarios. Estamos con un problema adicional en este sector porque este es un sector que tiene mucha vinculación con exportación; entonces es un sector que tiende a desvincularse de los problemas del mercado interno porque tiene la posibilidad de exportar, y agregar valor significa también tener más trabajadores.
Yo me acuerdo que alguna vez se escribió, en este país, hace mucho tiempo, a principios del siglo XX, que lo ideal era tener un habitante cada tres vacas. Sí se medía así, con lo cual a 45 millones de vacas que se componía en aquel momento el número bueno, tendríamos que tener 15 millones de argentinos. Ahora somos 40 que además comemos 120 kilos de proteínas animales por año, entre carne vacuna; carne de pollo - a la cual también representa el sector de Fantini - porque representa también a los frigoríficos avícolas, que han tenido también un crecimiento exponencial con toda la política que ha llevado adelante el Gobierno. Hoy ya no tenemos que importar pollos, hoy vendemos pollos y hasta vendemos los galpones, donde se crían, porque también han sido concebidos aquí, en la Argentina. Entonces es necesario saber todas estas cosas para ver lo difícil que es, desde las políticas del Estado, desde los distintos sectores del Estado poder articular los intereses de todos.
Hoy el sector ganadero está con excelentes precios, en un proceso de recapitalización porque le conviene mantener la mayor cantidad de vacunos en el campo, porque con lo que vende al precio que está vendiendo el mejor precio vivo en toda su historia, o por lo menos en las últimas décadas, sin lugar a dudas, obviamente esto impacta en la cadena frigorífica porque demandan precios que no se pueden pagar en el sector interno y se exportan. Entonces creo que esta medida, que estamos tomando hoy, que es por un año y va a ser monitoreada exige un compromiso muy fuerte de todos.
También queremos que los trabajadores participen de ese monitoreo – a través del Ministerio de Trabajo – en cada sector, en cada lugar de trabajo porque es muy importante el esfuerzo que estamos haciendo.
Les quiero comentar que hace muy poco tiempo también hicimos lo mismo con el sector de la pesca; hicimos una reducción de las exportaciones para tres variedades: calamares, merluza hubbsi y no me acuerdo la otra. En este caso lo hicimos únicamente únicamente por tres meses y vamos a ver cómo marcha y si marcha bien vamos renovando, como también lo hicimos con la prórroga de los bonos K para la metalmecánica, o como hace unos días el redireccionamiento también de subsidios para la compra de camiones.
Yo lo que quiero es un país trabajando, un país con cascos, o con esos gorritos blancos, que tienen los trabajadores y trabajadoras de la carne, a quienes doy la bienvenida, aquí en este Salón de la Mujer Argentina, porque en la casa de todos ustedes, de los trabajadores. (Aplausos).
Quiero decirles que me hace acordar mucho porque yo soy de La Plata - como ustedes saben- pegado a Berisso, a Ensenada, donde estaban los grandes frigoríficos Armour y Swift, y donde trabajaba mi abuelo. Mi abuelo se jubiló en la Aduana – ¿está Echegaray por ahí?– no está. Bueno, el otro día me mandó la ficha de mi abuelo, que parece ser que se entregaban… mi abuelo murió hace muchísimos años, pero rescataban los viejos legajos y se los mandaban a la familia. Cuando se lo di a mi madre, y mi madre que es una dura, pero dura de aquellas - si yo soy dura ustedes no saben lo que es mi madre - se puso a llorar. Hacía mucho tiempo que no la veía llorar y se puso a llorar, pues yo me acordaba de mi abuelo, que empezó trabajando en los frigoríficos. Él trabajaba en los frigoríficos, en Berisso, así que me une a los trabajadores de la carne un recuerdo también entrañable de mi abuelo, que fue mi segundo padre y a quien quise mucho.
Así que quiero decirles que el compromiso de esta Presidenta con los trabajadores, con los compañeros que dirigen y representan a estos trabajadores en la lucha por lo que recién señalaba el compañero Fantini: el mantenimiento de las fuentes de trabajo, la mejora de la calidad laboral de cada uno de los trabajadores es uno de los objetivos, que vamos a mantener siempre inalterables en este proceso, que yo digo es de reconstrucción nacional e inclusión social. Porque hemos tenido que reconstruir una nación que otros habían destruido y creo que todo lo cuesta vale - dice un refrán - y creo que muchas veces hay que pagar precio por eso. Y yo estoy dispuesta a pagar todos los precios, que haya que pagar, para seguir sosteniendo este modelo de crecimiento (Aplausos).
La verdad que yo confío mucho en los trabajadores y en los jóvenes, que son la misma cosa, que nadie se equivoque, cuando yo voy a las fábricas y recorro las fábricas, la mayoría son pibes jóvenes; lo pueden ver las automotrices. Me tocó recorrerlos en las fábricas de cerámicos, que el otro día me vinieron a anunciar nuevas inversiones en Alberdi, chicos de Salta que era su primer trabajo, todos pibes jóvenes; cuando voy a los laboratorios también, todos chicos jóvenes, con lo cual – en realidad - jóvenes y trabajadores es un mismo concepto la República Argentina y ustedes son los que tienen que resguardar para que este proyecto siga adelante, porque son ustedes no solamente los protagonistas, sino los beneficiarios de este proyecto, que va a permitir que sus hijos tengan educación y las cosas que no tuvieron las generaciones anteriores y que todavía estamos pagando las consecuencias de esa cosas. (Aplausos).
Finalmente, como una anécdota para terminar: yo recibo todos los días información acerca de mediciones constantes de todo y hoy me llegó la de turismo emisivo y la de turismo receptivo, o sea la de los argentinos que salen al exterior y la de los extranjeros que vienen a la Argentina. En febrero, fueron mayor la cantidad de argentinos, que salieron al exterior que los que entraron, es una característica estacional de febrero, pero lo cierto es que esta vez un poco más. Pero yo miraba otro dato, que me llamaba la atención y veo la aparición de un nuevo sujeto social, porque el promedio - por ejemplo - de los extranjeros en gastos estaba en unos 81 dólares por día, al frente los brasileros con 166 dólares por día; abajo los uruguayos también con 158 dólares por día. Y cuando veo el promedio del turista argentino, que salió afuera, fue de 69 dólares por día. Es una clase social que - tal vez- no había vacacionado y vos Mariano lo sabés porque cuando se lo comenté al ministro, Mariano es Mariano Recalde, presidente de Aerolíneas Argentinas - el hijo de Héctor Recalde que creo que todos los conocen - que es un joven también. Bueno, ya no tan joven, está con 40, más o menos, ya estás más para este lado que para aquello, pero bueno, no importa, pero me decía que este nuevo sujeto social que aparece también, que es importante, y que por primera vez vacaciona en el exterior y que se nota – me decía el ministro - porque ibas en el avión de Aerolíneas y preguntan dónde está el baño, o qué es lo que hay que hacer, porque se ve que es la primera vez que viajan en un avión. Esto significa que también ha una nueva, afortunadamente cantidad de argentinos que pueden darse, tal vez, ese pequeño lujito, que es ir a una playa, a un lugar de afuera. Bueno, que después no se entusiasmen demasiado y que vuelvan a la Argentina, que los necesitamos gastando y consumiendo, aquí en la República Argentina. (Aplausos).
Pero digo esto porque tenemos que hacer una correcta y adecuada lectura: los números si uno los mira así como números asépticos no dicen nada, pero cuando uno los interpreta y cuando uno ve esos números representados en conductas, en comportamientos, en sujetos sociales nuevos advierte la profunda transformación que hemos tenido, en la República Argentina. Y yo me siento muy orgullosa de ser parte de ese proyecto; no me siento protagonista de ese proyecto para nada, los protagonistas son la sociedad y el pueblo. En todo caso me siento un instrumento de esa historia para seguir avanzando en ese proyecto integrador y abarcativo, que contempla a los 40 millones argentinos.
Muchas gracias y muy buenas tardes a todos ya todas. (Aplausos).
Gracias, muchas gracias, muy buenas tardes a todos y a todas; señor vicepresidente de la Nación; señor presidente de la Cámara de Diputados; señores dirigentes de la Confederación General del Trabajo; titulares de los distintos gremios que la componen; señor titular de la CTA; señor titular de la Unión Industrial Argentina; los invitados especiales del día de la fecha; señor secretario general del Sindicato de la Carne y el señor secretario de la Cámara Exportadora: ustedes dirán qué hago yo con esta caja de Milka acá. Bueno, son chocolates, ya los conocen todos, pero los volvimos a fabricar en la República Argentina. (Aplausos). Así que no pienso convidarles les aclaro, me la llevo toda para mi casa porque me encantan los chocolates Milka, pero me acuerdo que un día comí un chocolate muy rico y llamé muy enojado a Débora – dónde estás Débora – ahí, porque bueno era rico el chocolate, pero no estaba fabricado acá. Estaba fabricado por acá cerca, pero no en la Argentina, no importa dónde y me enojé mucho. Y hoy el Secretario de Comercio vino con la primera caja que sale de la fábrica de chocolates, hecho en el país. (Aplausos).
Y la verdad que en un país donde la industria lechera, donde la leche es uno de nuestros productos básicos, donde hemos aumentado además la producción a niveles record, más de 11 mil millones de litros, el año pasado, 11.600 millones de litros para ser más exacto, la verdad que era imperdonable que no estuviéramos haciendo chocolates en la República Argentina, estamos haciendo otros, pero queríamos que hiciéramos estos: los de la vaquita violeta y blanca.
Y hablando de vaquitas, estamos anunciando en el día de la fecha una importante medida fiscal vinculada a la reactivación del sector de la industria frigorífica, esto es la industrialización de la carne. La medida consiste básicamente en una reducción de los derechos de exportación del 15%, que hoy tienen lo que denominamos termoprocesados, son los que se utiliza la denominada vaca vieja. Si habremos hablado de la vaca vieja - Dios mío – la nueva, de la vieja, de la mediana; de la vaca vieja que es lo que antes conocíamos como viandadas – yo cuando era chica comía la viandada- que son los enlatados y el extracto también de carne que se vende a granel y que hoy está en un 15%. Y le hemos hecho una reducción, durante un año, al 5% para reactivar la industria frigorífica. (Aplausos)
Ustedes saben que la de los termoprocesados es precisamente dentro del sector frigorífico la que más cantidad de valor agrega al producto cárnico; esto es una transferencia de 12 millones y medio de dólares al sector, pero también vamos a pedirle cosas porque vamos a conformar una comisión, integrada por la Secretaría de Planeamiento Económico, o sea por un sector del Ministerio de Economía; también la Secretaría de Comercio; Ministerio de Trabajo; Industria y seguramente los informes que nos hará la AFIP acerca de la cantidad de empleados que tiene cada firma porque vamos a exigir el mantenimiento y aumento de las plantas, porque si hay una transferencia importante en materia de recursos públicos - porque después de todo los derechos de exportación son tributos que van a la sociedad - vamos también a reclamar y exigir que precisamente se mantengan e incrementen las plantas de personal del sector vinculado a esto (Aplausos).
El mismo será a través de un monitoreo mensual, que estará a cargo de varios funcionarios. Yo siempre pongo a varios funcionarios, dejar en manos de un solo funcionario las cosas nunca es conveniente, siempre es mejor que varios controlen porque da más resultado, lo he comprobado. Entonces lo que es importante es saber que este renunciamiento del sector público a percibir lo que legítimamente le corresponde tiene que tener la contrapartida en el sector empresario precisamente porque estamos transfiriendo una importante cantidad de dinero y también se va a exigir incrementar un 5% la exportación, de manera tal de que todo es que articulado.
Yo escuchaba al señor titular, al Secretario de la Carne pedir participación de los trabajadores en el Instituto Nacional de la Carne, eso está a través de una ley. Creo que mañana mismo podemos enviar el proyecto al Congreso para que los trabajadores participen (Aplausos).
Es muy cortante que uno pueda advertir porque ahora se ha recuperado muchísimo la ganadería, hay una capitalización del sector productor, que como está con muy buena pastura y con muy buenos precios la producción vende menos o más caro y entonces comienzan los productos del otro lado. Vamos a hablar las cosas como son en la Argentina porque las cosas no son gratis ni mágicas; más o menos pasa lo mismo con algunos problemas que tenemos con la hierba ahora. Le hemos aumentado un 100%, a 1.70 el kilo de hoja, ¿no es cierto? al pequeño productor yerbatero, de Misiones, y vamos a tratar de que esto sea absorbido por la parte de cadena de valor - por lo menos en una gran parte - que es la que la industrializa, que son grandes empresas: tres, cuatro, o cinco grandes empresas y esperemos que no nos harán hacer faltar la yerba, porque si no va a haber problemas y vamos a aplicar - si es necesario - la Ley de Abastecimiento porque no es posible que con las extraordinarias rentabilidades que han tenido todos los sectores hagan esto. (Aplausos). Pero veamos cómo es el tema, porque muchas veces escuchamos solamente a un sector y tenemos que saber que cuando se le aumenta al productor - sea de carne, que obviamente es un productor de mucho más ingresos que el productor yerbatero, sin lugar a dudas - siempre esto repercute en toda la cadena y terminar repercutiendo en el punto final que es la góndola, esto es el consumidor. Nada es gratis y nada es mágico.
Por eso hay que tratar de articular todos los intereses para que podamos seguir funcionando como país. Y la industria cárnica, también la frigoríficos han tenido importantes ganancias otrora, entonces también es necesario que en este momento pongan el esfuerzo, junto con el Estado, si hubo rentabilidades muy buenas en otras etapas para mantener el nivel de trabajo, que es mantener el nivel de consumo, que es mantener el nivel de la actividad económica. (Aplausos).
Porque cuando un trabajador de un frigorífico pierde el empleo es un trabajador que no va a comprar otros productos, que hacen otros trabajadores, o que generan otros empresarios. Estamos con un problema adicional en este sector porque este es un sector que tiene mucha vinculación con exportación; entonces es un sector que tiende a desvincularse de los problemas del mercado interno porque tiene la posibilidad de exportar, y agregar valor significa también tener más trabajadores.
Yo me acuerdo que alguna vez se escribió, en este país, hace mucho tiempo, a principios del siglo XX, que lo ideal era tener un habitante cada tres vacas. Sí se medía así, con lo cual a 45 millones de vacas que se componía en aquel momento el número bueno, tendríamos que tener 15 millones de argentinos. Ahora somos 40 que además comemos 120 kilos de proteínas animales por año, entre carne vacuna; carne de pollo - a la cual también representa el sector de Fantini - porque representa también a los frigoríficos avícolas, que han tenido también un crecimiento exponencial con toda la política que ha llevado adelante el Gobierno. Hoy ya no tenemos que importar pollos, hoy vendemos pollos y hasta vendemos los galpones, donde se crían, porque también han sido concebidos aquí, en la Argentina. Entonces es necesario saber todas estas cosas para ver lo difícil que es, desde las políticas del Estado, desde los distintos sectores del Estado poder articular los intereses de todos.
Hoy el sector ganadero está con excelentes precios, en un proceso de recapitalización porque le conviene mantener la mayor cantidad de vacunos en el campo, porque con lo que vende al precio que está vendiendo el mejor precio vivo en toda su historia, o por lo menos en las últimas décadas, sin lugar a dudas, obviamente esto impacta en la cadena frigorífica porque demandan precios que no se pueden pagar en el sector interno y se exportan. Entonces creo que esta medida, que estamos tomando hoy, que es por un año y va a ser monitoreada exige un compromiso muy fuerte de todos.
También queremos que los trabajadores participen de ese monitoreo – a través del Ministerio de Trabajo – en cada sector, en cada lugar de trabajo porque es muy importante el esfuerzo que estamos haciendo.
Les quiero comentar que hace muy poco tiempo también hicimos lo mismo con el sector de la pesca; hicimos una reducción de las exportaciones para tres variedades: calamares, merluza hubbsi y no me acuerdo la otra. En este caso lo hicimos únicamente únicamente por tres meses y vamos a ver cómo marcha y si marcha bien vamos renovando, como también lo hicimos con la prórroga de los bonos K para la metalmecánica, o como hace unos días el redireccionamiento también de subsidios para la compra de camiones.
Yo lo que quiero es un país trabajando, un país con cascos, o con esos gorritos blancos, que tienen los trabajadores y trabajadoras de la carne, a quienes doy la bienvenida, aquí en este Salón de la Mujer Argentina, porque en la casa de todos ustedes, de los trabajadores. (Aplausos).
Quiero decirles que me hace acordar mucho porque yo soy de La Plata - como ustedes saben- pegado a Berisso, a Ensenada, donde estaban los grandes frigoríficos Armour y Swift, y donde trabajaba mi abuelo. Mi abuelo se jubiló en la Aduana – ¿está Echegaray por ahí?– no está. Bueno, el otro día me mandó la ficha de mi abuelo, que parece ser que se entregaban… mi abuelo murió hace muchísimos años, pero rescataban los viejos legajos y se los mandaban a la familia. Cuando se lo di a mi madre, y mi madre que es una dura, pero dura de aquellas - si yo soy dura ustedes no saben lo que es mi madre - se puso a llorar. Hacía mucho tiempo que no la veía llorar y se puso a llorar, pues yo me acordaba de mi abuelo, que empezó trabajando en los frigoríficos. Él trabajaba en los frigoríficos, en Berisso, así que me une a los trabajadores de la carne un recuerdo también entrañable de mi abuelo, que fue mi segundo padre y a quien quise mucho.
Así que quiero decirles que el compromiso de esta Presidenta con los trabajadores, con los compañeros que dirigen y representan a estos trabajadores en la lucha por lo que recién señalaba el compañero Fantini: el mantenimiento de las fuentes de trabajo, la mejora de la calidad laboral de cada uno de los trabajadores es uno de los objetivos, que vamos a mantener siempre inalterables en este proceso, que yo digo es de reconstrucción nacional e inclusión social. Porque hemos tenido que reconstruir una nación que otros habían destruido y creo que todo lo cuesta vale - dice un refrán - y creo que muchas veces hay que pagar precio por eso. Y yo estoy dispuesta a pagar todos los precios, que haya que pagar, para seguir sosteniendo este modelo de crecimiento (Aplausos).
La verdad que yo confío mucho en los trabajadores y en los jóvenes, que son la misma cosa, que nadie se equivoque, cuando yo voy a las fábricas y recorro las fábricas, la mayoría son pibes jóvenes; lo pueden ver las automotrices. Me tocó recorrerlos en las fábricas de cerámicos, que el otro día me vinieron a anunciar nuevas inversiones en Alberdi, chicos de Salta que era su primer trabajo, todos pibes jóvenes; cuando voy a los laboratorios también, todos chicos jóvenes, con lo cual – en realidad - jóvenes y trabajadores es un mismo concepto la República Argentina y ustedes son los que tienen que resguardar para que este proyecto siga adelante, porque son ustedes no solamente los protagonistas, sino los beneficiarios de este proyecto, que va a permitir que sus hijos tengan educación y las cosas que no tuvieron las generaciones anteriores y que todavía estamos pagando las consecuencias de esa cosas. (Aplausos).
Finalmente, como una anécdota para terminar: yo recibo todos los días información acerca de mediciones constantes de todo y hoy me llegó la de turismo emisivo y la de turismo receptivo, o sea la de los argentinos que salen al exterior y la de los extranjeros que vienen a la Argentina. En febrero, fueron mayor la cantidad de argentinos, que salieron al exterior que los que entraron, es una característica estacional de febrero, pero lo cierto es que esta vez un poco más. Pero yo miraba otro dato, que me llamaba la atención y veo la aparición de un nuevo sujeto social, porque el promedio - por ejemplo - de los extranjeros en gastos estaba en unos 81 dólares por día, al frente los brasileros con 166 dólares por día; abajo los uruguayos también con 158 dólares por día. Y cuando veo el promedio del turista argentino, que salió afuera, fue de 69 dólares por día. Es una clase social que - tal vez- no había vacacionado y vos Mariano lo sabés porque cuando se lo comenté al ministro, Mariano es Mariano Recalde, presidente de Aerolíneas Argentinas - el hijo de Héctor Recalde que creo que todos los conocen - que es un joven también. Bueno, ya no tan joven, está con 40, más o menos, ya estás más para este lado que para aquello, pero bueno, no importa, pero me decía que este nuevo sujeto social que aparece también, que es importante, y que por primera vez vacaciona en el exterior y que se nota – me decía el ministro - porque ibas en el avión de Aerolíneas y preguntan dónde está el baño, o qué es lo que hay que hacer, porque se ve que es la primera vez que viajan en un avión. Esto significa que también ha una nueva, afortunadamente cantidad de argentinos que pueden darse, tal vez, ese pequeño lujito, que es ir a una playa, a un lugar de afuera. Bueno, que después no se entusiasmen demasiado y que vuelvan a la Argentina, que los necesitamos gastando y consumiendo, aquí en la República Argentina. (Aplausos).
Pero digo esto porque tenemos que hacer una correcta y adecuada lectura: los números si uno los mira así como números asépticos no dicen nada, pero cuando uno los interpreta y cuando uno ve esos números representados en conductas, en comportamientos, en sujetos sociales nuevos advierte la profunda transformación que hemos tenido, en la República Argentina. Y yo me siento muy orgullosa de ser parte de ese proyecto; no me siento protagonista de ese proyecto para nada, los protagonistas son la sociedad y el pueblo. En todo caso me siento un instrumento de esa historia para seguir avanzando en ese proyecto integrador y abarcativo, que contempla a los 40 millones argentinos.
Muchas gracias y muy buenas tardes a todos ya todas. (Aplausos).
